Aída: episodios de la temporada 10

Esperanza Sur cumple 200 años de existencia y se dispone a celebrarlo por todo lo alto. Sin embargo, debido a la crisis, la junta de distrito suspende todas las celebraciones. Pese a ello, Chema propone que sean ellos mismos quienes recauden dinero para celebrar su aniversario. Con las aportaciones de los vecinos, cada uno debe proponer un proyecto de celebración y Chema es el encargado de elegir el mejor.

Mauricio intenta dar un golpe de estado al caer en uno de los habituales entuertos del Jonathan y de Mecos. Paralelamente, a Fidel y a Germán les conceden una beca Erasmus para estudiar en el extranjero. Luisma, Macu y Barajas, hartos de trabajar, idean un plan para no volver a dar un palo al agua en su vida y se ponen a vender pulseras de la felicidad.

Fidel y Germán deciden finalmente marcharse a Suecia en su viaje de Erasmus. Al poco tiempo de llegar, el hijo de Chema conoce a un sueco que quiere que le enseñe sevillanas y Germán hace muy buenas migas con las mujeres del país nórdico. Por su parte, Chema echará mucho de menos a Fidel. Por otro lado, tras el fallecimiento de una de las ancianas más adineradas de Esperanza Sur, Mauricio hace todo lo posible para sacar partido a esta situación y aparecer en el testamento de la difunta.

Jesús Vázquez, que actualmente conduce la segunda edición de La Voz, contrata los servicios de la empresa de limpieza de Luisma y Macu. Paralelamente, la locutora de radio Macarena Berlín trata de aconsejar a Soraya en su llamada telefónica al programa Hablar por hablar. Por otro lado, la familia García descubre un mensaje oculto de Aída.

Chema recibe una carta en la que Fidel le pide que le envíe más embutidos españoles porque a los suecos les encanta. Al escuchar esto, Mauricio no duda ni un segundo en hacer las maletas e irse a Suecia a vender morcillas. Mientras tanto, Tony, que está desesperado porque no encuentra trabajo, le echa una mano a Soraya en el bar. En su afán por hacer más rentable el negocio familiar, idean una artimaña para ganar dinero a costa de los clientes. Paralelamente, Chema se ofrece a Macu para darle clases de conducir, pero la sobrina del hostelero acaba muy harta de él y encuentra apoyo en Paz, que en su día también sufrió las prácticas del tendero.

En su enésimo intento por olvidar a Luisma, Paz se apunta a una escuela de bailes de salón por recomendación de Fidel. Paralelamente, Chema le dará a Soraya una sorpresa muy especial: se llama Mohamed, viene del Sáhara y tiene ocho años.

Soraya finge que ha hecho un pleno al 15 en una quiniela para darles un escarmiento a los hombres del bar Reynols, que, encabezados por Mauricio, se burlan de ella porque consideran que el fútbol no es cosa de mujeres. Mientras tanto, Ainhoa y Luisma quedan para cenar, pero justo antes de acudir a la cita la joven sufre un accidente.

Chema y Fidel organizan el festival Culturanza Sur, una iniciativa que al principio es muy criticada por Mauricio hasta que conoce a Leticia, una joven y atractiva cantautora de quien el tabernero cae rendido a sus pies. En el transcurso del evento, Eugenia comparte su pasión por la gastronomía con un famoso escritor y Barajas es confundido con un pintor muy importante. Paralelamente, Aidita tiene su primera menstruación mientras está jugando a la videoconsola con Jonathan.

Mauricio, Eugenia, Paz y Jonathan ya han regresado de Etiopía y ahora son los Mursis los que viajan a Esperanza Sur para participar en Perdidos en la ciudad y conocer las costumbres de los García. Mientras tanto, Mauricio tiene molestias al ir al cuarto de baño y le diagnostican una infección de orina.

Soraya se apuesta con Mauricio que Chema no es un llorón. Si gana Soraya, Mauricio tiene que ir a donar sangre y si gana el hostelero, la camarera va a tener que acompañarle a una corrida de toros. Por otra parte, Barajas se ha enamorado de una repartidora que sirve en la tienda de Chema cada mes. Lleva casi un año viéndola y lo máximo que ha hecho es sonreírle a lo lejos. Por eso Luisma decide ayudarle a que conquiste a la chica.

Debido a los recortes, el periódico del barrio se ve obligado a cerrar. Luisma y Barajas se animan a coger el testigo y montar un nuevo diario. El primer número de La Puta Verdad, que es como se llama el diario, resulta ser una muy malo, de modo que deciden inventarse un asesino en serie para vender. Paralelamente, Jonathan y Eugenia se dan cuenta de que Mauricio lleva cobrándoles 20 céntimos de más en el café durante los últimos 11 años. En total, el hostelero les ha estafado 6.000 euros. Abuela y nieto juran venganza.

Ante la negativa de su hermana Paz de ayudarle con sus problemas, Simón se hace pasar por médico para estafar a los confiados pacientes. Mauricio, por su parte, está entusiasmado con Dolores porque tan solo falta un día para consumar su relación. Llevan un mes saliendo y, después de este tiempo, ella cree que ya es el momento de acceder a los deseos del hostelero. Sin embargo, cuando llega el momento, Mauricio es incapaz de rematar la jugada. Para superar el problema, Machupichu le consigue Viagra, pero por error se toma un somnífero y el segundo intento con Dolores es todavía peor.

Jonathan y Eugenia van poniendo al día a Simón de la vida de cada uno en el barrio, pero de manera intencionadamente falsa. Simón cree así que Fidel es un transexual cuando en realidad la operación que ha tenido es de amígdalas. Además, también piensa que Chema es un actor porno y que su propia hermana, Paz, es lesbiana. Cuando descubre el engaño, utiliza el mismo juego para vengarse de Jonathan. Paralelamente, Mauricio monta un negocio clandestino de juego en su bar aprovechando que el casino del barrio ha cerrado temporalmente. Para no levantar sospechas en el vecindario, los clientes acuden disfrazados de frailes como si el Reinols fuera su centro de reunión mientras el monasterio está en obras.

Mauricio finge ser mudo para evitar una multa de aparcamiento. En consecuencia, recibe la visita de la representante de un asociación de sordomudos y queda impactado por su belleza. Para poder comunicarse con ella, le pide a Fidel que le enseñe el lenguaje de signos. Paralelamente, Soraya no comprende por qué Simón rechaza cualquier plan que se le ocurre organizar. Harta de sentirse ignorada le pregunta qué motivos tiene para esquivarla y él le explica que aún no ha superado las crueles burlas a las que le sometió en la infancia. Arrepentida, Soraya decide pedirle perdón públicamente y le prepara una fiesta de antiguos alumnos.

Mauricio propone a Simón un negocio rentable que consiste en organizar bodas a través de una empresa ficticia con el único objetivo de quedarse con la fianza que las parejas tienen que depositar para organizar el evento. Paralelamente, Luisma y Barajas se han apuntado a un torneo de ping-pong por parejas, pero Luisma, al ver que Barajas es un pésimo jugador, cambia de idea y le pide a Paz que juegue con él. Sin embargo, surge un problema cuando averiguan que se trata de un torneo masculino, por lo que Paz tiene que disfrazarse de hombre. Mientras tanto, Soraya sospecha que se ha quedado embarazada. Antes de saber el resultado de la prueba de embarazo, la esconde en la mochila de su hija. Chema descubre el test y cree que Aidita mantiene relaciones sexuales sin protección.

La cocinera del bar Reinols ha renunciado a su puesto de trabajo debido a las constantes bajadas salariales que aplica Mauricio. En su lugar empieza a trabajar la Junca, a la que se le ocurre utilizar carne de gato en las hamburguesas para rentabilizar al máximo el negocio. Fidel sospecha que la calidad de la comida que se ofrece a dos euros no puede ser buena y decide que un laboratorio analice su composición. El resultado es mucho más alarmante de lo que creía. Paralelamente, Luisma y Barajas descubren un compañero de colegio llamado Marcos, el Pajuelas, ha conseguido ser el presidente de Aeronautic Space, una importante empresa aeronáutica que está preparando un proyecto puntero dentro del sector.

Simón le pide a Paz que le presente a su amiga Claudia y ella, viendo la oportunidad de reencontrarse con Luisma, le dice que acepta con la condición de que lleve a un amigo a la cita. Para su decepción, su hermano se presenta con Barajas. Sin embargo, los intentos de Paz por encontrar a algún chico que le haga olvidar a su exnovio dan sus frutos cuando conoce a Ataulfo, un chico cuyo nombre le recuerda a un juego que durante años ella tenía con Luisma.