Los creadores de la serie Steven Moffat y Mark Gatiss pensaron en Benedict Cumberbatch para el papel de Sherlock cuando le vieron en 'Atonement' ('Expiación. Más allá de la pasión' en su traducción al español).
Durante el lapso de tiempo entre la primera y la segunda temporada, los protagonistas de 'Sherlock' fueron escogidos para participar en la saga de Peter Jackson 'El Hobbit'. En aquella ocasión, Martin Freeman se lleva el protagonismo al ser quien encarna al hobbit Bilbo Bolsón. Cumberbacth da vida -y voz- al dragón Smaug a través de captura de movimiento.
En esta versión de las peripecias de Sherlock Holmes, el Dr. Watson fue herido en un hombro pero tiene dolores psicosomáticos en la pierna. Esta es una pequeña referencia a la historia original donde Arthur Conan Doyle no era muy preciso al localizar la herida de guerra de Watson. Afortunadamente, la dolencia sólo le dura un capítulo.
Al igual que en las novelas de Sir Arthur Conan Doyle, el concepto 'deducción' se usa de forma errónea. Como en el diagnóstico médico, y también los detectives, lo que realmente utiliza Holmes para resolver sus casos no es ni método deductivo ni inductivo, sino una tercera forma de hacer inferencias, el método abductivo.