La que se avecina: episodios de la temporada 6

Antonio Recio (Jordi Sánchez) tiene que vérselas con la justicia después del centollazo que lanzó contra Zapatero en una rueda de prensa. Sus planes para presentarse a presidente se ven frustrados con el adelantamiento de los comicios y, pese a convertirse en el fugaz líder de masas de la Revolución de los Centollos, nadie le espera a la salida del juzgado. Mientras, en el Bajo B, Judith (Cristina Castaño) trata de ceñirse a su nuevo papel de madre de familia. Dejando sus mil modelitos a un lado, despeinada y ataviada con un chándal que no le hace justicia, la joven se ha convertido en una ama de casa estresada sin facilidad para desarrollar las tareas domésticas. Las dudas sobre haberse convertido en la Sra. Pastor comienzan a ganar terreno en su cabeza mientras las chicas deciden sacarla de fiesta para alejarla de sus preocupaciones. Además, Maite (Eva Isanta) quiere que Raquel y Lola, que no han hablado desde lo ocurrido con Javi, dejen de odiarse y hagan las paces de una vez por todas. Por otro lado, el mandato de Judith como presidenta ha vencido y los vecinos tienen que elegir a otro candidato que se haga cargo de una avería en la salida de humos de la comunidad. Mientras, Maxi, Leo y Vicente se marchan a Albacete para rescatar a Amador quien, como siempre, se ha metido en un lío.

Determinado a boicotear el mandato presidencial de Araceli, el mayorista de pescado planea llevar a cabo una oscura maniobra: atascar las cañerías de la comunidad para provocar la indignación colectiva de los propietarios de Mirador de Montepinar.

La huelga de los servicios de limpieza del Ayuntamiento ha provocado un desastre en Mirador de Montepinar: cubos desbordados por la basura y un insoportable hedor indignan a los residentes del lujoso complejo inmobiliario.

Tras contraer matrimonio, Parrales, el empleado de Antonio Recio, viaja al extranjero para disfrutar de su luna de miel junto a su flamante esposa. En ausencia de su ayudante, el mayorista de pescado y marisco contrata a Nines como dependienta de Mariscos Recio. Entretanto, Coque comienza a ejercer de padre con Toñín, hecho que suscita los celos de Antonio.

Tener que prescindir de un grupo de excelentes profesionales incluidos en la lista negra del ERE que piensa llevar a cabo la empresa para la que trabaja es la labor más difícil a la que se enfrenta Judith en su carrera profesional.

El mayorista de pescado y marisco recibe la llamada de una asociación que le informa que en la fecha y en el hospital en el que nació han tenido lugar varios casos de niños robados. Convencido de que es uno de ellos, Antonio Recio centrará sus esfuerzos en localizar a su verdadera madre. Por otra parte, Enrique Pastor, preocupado al no conseguir dejar embarazada a Judith, acude en secreto a un consulta médica especializada para hacerse un análisis que verifique la calidad de su semen. Entretanto, con su casa embargada y subastada, Amador y Maite recurren al movimiento 15-M para evitar que les desalojen del inmueble en el que viven.