Punta Escarlata: episodios de la temporada 1

Bernardo Bosco (Carles Francino, 'Bandolera') y Max Vila (Antonio Hortelano, 'Compañeros') son dos jóvenes policías a quienes les asignan la complicada misión de investigar un crimen de hace ocho años en un pequeño pueblo de la costa. Una vez allí, los dos descubrirán que las cosas no son lo que parecen y que cada pista que consiguen provoca un nuevo asesinato que, piensan, podría estar relacionado con los fatídicos sucesos del pasado.

Mientras el médico forense analiza los cadáveres en busca de más pistas sobre la muerte de las dos jóvenes, Ángela, la prometida de Bosco, conseguirá localizar al padre de Lucía, Alejandro. Éste confirmará a los policías que tanto él como su hija habían estado en el pueblo, pero Max y Bosco sospecharán que Alejandro no está contando todo lo que sabe, igual que el doctor Rozas, demasiado interesado en Lucía. Además, la joven logrará recordar, a través de un sueño, que Marcos y otros niños fueron sus amigos y jugaban cuando eran pequeños en el camping de Punta Escarlata.Por otra parte, Bosco y Max investigarán a su primer sospechoso oficial: Jerónimo Zamora, Jero, traficante de poca monta que convenció a su novia de aquel entonces, Chesca, de que dijera que habían pasado esa noche juntos. Sin embargo, la camarera de Las Cabañas le contará a la policía que la noche de los asesinatos había dejado a Jero solo en la verbena.Finalmente, Bosco y Ángela hablarán de su inminente boda, pero él no puede evitar sentirse atraído por Eva.

Todo parece indicar que el caso de Punta Escarlata está cerrado: el doctor Rozas, al encontrarse los cuerpos de Anabel e Icíar y no poder soportar la culpa, dejó un mensaje a su hijo y se suicidó. Sin embargo, Bosco no está convencido y sospecha que Rozas quizás tuvo un cómplice. Marcos no acaba de creer lo que ha pasado y busca la ayuda de Lucía, la única que puede comprender su dolor. Además, el padre de Lucía cuenta qué le ocurrió a su familia aquel verano de hace ocho años.

Lucía, al comprobar que la chica de sus visiones ha desaparecido, decide volver a Punta Escarlata. Ximo confiesa a Bosco y Max que había quedado con Raquel, pero al final él no se presentó. Los habitantes del pueblo se movilizan para recorrer el bosque y encontrar a Raquel. Todo apunta a que el responsable de la desaparición es Cap Cebolla, que amenazó a todas las chicas del pueblo. Además, Reyes intercepta en la playa una entrega de heroína que iba a recibir Jero.

Bosco llega a la conclusión de que tiene que haber dos asesinos en Punta Escarlata: uno frío y cerebral y otro que no es capaz de controlar sus impulsos. Sin embargo, no han podido conseguir las huellas que había en el bolso de Raquel, porque alguien las borró. Lo que no saben es que ese alguien es el Sargento Reyes. Además, Ximo reconoce que había ocultado información sobre la tarde en que atacaron a Raquel, y Lucía tiene una premonición en la que atacan a otra de las chicas de Punta Escarlata.

Kim aparece muerta en el mismo sitio donde enterraron a Anabel e Icíar hace ocho años. Sin embargo, esta vez el asesino ha dejado restos de su ADN. Tras descartar a Jero, que pasó la noche en los calabozos, Bosco y Max investigan a otros habitantes de Punta Escarlata, entre los que está el Sargento Reyes, sobre el que cada vez tienen más sospechas. Mientras, Ángela viaja hasta Punta Escarlata, donde se reencontrará con Bosco, sin saber lo que él siente por Eva.

Al descubrir que Chesca ha recaído en las drogas y pretende dejar el trabajo, Eva trata de ayudarla para que ponga fin a su adicción. Tras saquear la caja de Las Cabañas, Chesca acude a la casa donde se esconde Jero dispuesta a robarle la droga. Cuando Reyes y Jero llegan al lugar, la descubren y deciden hacerle pagar su intento de robo. Gracias a los micrófonos que instalaron en el barco de Reyes, Max y Bosco averiguan que el sargento mantiene una relación sentimental con Teresa, la esposa del doctor Rozas, y que la viuda se ha reunido con al sargento para informarle de su decisión de abandonar el pueblo junto a sus hijos.

Las Cabañas celebra una fiesta exactamente igual a la de hace ocho años, en la que murieron Anabel e Icíar, y a la que se prevé que acuda el asesino de la localidad. Todos permanecen alerta para identificar cualquier comportamiento sospechoso, sobre todo después de la última visión de Lucía, en la que una chica, a la que no ha podido reconocer, es atacada y asesinada. Tras ser atrapado por Bosco y Max mientras trata de huir, Reyes asegura a los policías que les ayudará a atrapar a Jero para que pague por el crimen de Chesca.