Cuando la primera temporada de 'Downton Abbey' vio la luz, Julian Fellowes (creador y productor ejecutivo) se mostró muy enfadado con las feroces críticas que señalaban varios errores de anacronía -falta de coherencia cronológica- en la serie, como por ejemplo, las ondas de radio necesarias para ver la televisión o la doble línea amarilla en las carreteras británicas. El enfado de Fellowes no tuvo que ver únicamente con que su producto fuese criticado, sino por la asunción por parte de la prensa de que toda crítica era válida. Por ejemplo, estos críticos decían que 'novio' (boyfriend) no existía como palabra para definir ese concepto por aquel entonces, aunque el origen de esta palabra data de 1889. En un artículo en el Radio Times en septiembre de 2011 el creador de la serie se disculpaba y aclaraba que "me he comportado bastante mal por haber entrado al trapo".
De acuerdo a la novela de Jessica Fellowes 'El mundo de Downton Abbey', la aclamada serie de televisión cuesta una media de 1 millón de libras por episodio, algo así como 1.200.000 euros aproximadamente.
La casa de Sir Anthony Strallan (Robert Bathurst) es la misma que la del personaje que interpretaba Maggie Smith en 'Muerte a media noche. La actriz se trata también se una de las protagonistas de 'Downton Abbey'. Ambas producciones han sido escritas por Julian Fellowes.
Tanto los exteriores e interiores de la serie son grabadas en el Castillo de Highclere, una impresionante casa de campo victoriana que tiene una extensión de 24 km² y está situada en Hampshire (Inglaterra).