Pesadilla en la cocina era la última esperanza para los dueños de La Tarantella, un restaurante italiano ubicado en Barcelona. "Era el último clavo al que agarrarse", aseguró Carmen Gómez a El HuffPost sobre su participación en el programa de laSexta. El matrimonio formado por Nicola y Carmen apostaron por la ayuda del formato para conseguir superar el bache que atravesaba en aquel momento el negocio. Y allí que se fue Alberto Chicote con todo su equipo.
El programa de laSexta visitó el restaurante barcelonés en febrero del 2018 para intentar reflotarlo, aunque la entrega no se emitió hasta noviembre de 2019. La Tarantella se convirtió en uno de los episodios más recordado por los espectadores al provocar las arcadas del cocinero, que lo definió como un "pozo de mierda". Sin embargo, muchos desconocen es la triste historia que hay detrás de las grabaciones del formato en el negocio barcelonés.
Atresmedia
Nicola fue el encargado de ponerse en contacto con el programa "para demostrar que somos personas y que también sufrimos". De hecho, la semana de grabación fue uno de los momentos más complicados para el matrimonio que llevaban al frente del negocio más de una década. El último día se grabó tras el fallecimiento del padre de propietario y recibieron una carta de desahucio por parte del propietario por "deber varios meses".
Aunque "la experiencia del programa fue buena", la dueña del restaurante barcelonés afirmó que la relación con Chicote fue "fría" fuera de los focos y "buena" delante de las cámaras. Sin embargo, el último día de rodaje fue más cercano con ellos al ver el duro momento que estaban viviendo. "Esa noche y ese día fue duro. Estuvimos y dimos la cara y él ahí sí que estuvo más cercano", señaló al citado medio Carmen Gómez.
Qué fue de La Tarantella
"Chicote venía el momento de grabar, estaba lo justo. Con el equipo que hay detrás pasamos muchas horas y ha sido fantástico, nos ayudaron", reconoció la dueña. A pesar de la reforma de Pesadilla en la cocina, La Tarantella tuvo que cerrar sus puertas a los meses de la grabación. No obstante, ahora aparece como abierto en Google y las últimas reseñas a los antiguos dueños fueron favorables.
"Restaurante de tradición italiana muy agradable y en el corazón del barrio de Gràcia. Llevo muchos años visitándolo y siempre sales satisfecho por la cocina y el trato recibido", escribió un usuario en TripAdvisor. "Las pizzas deliciosas y bien cargadas de ingredientes" o "la originalidad marca tendencia, como la pizza de patata o la flambeada... Un lujazo a precio superasequible" se pueden leer en otras valoraciones. Aunque también había críticas al ruido, la atención al público o el horario que tenían establecido.
Según se puede ver en Google, La Tarantella de Barcelona tiene abiertas sus puertas y parece que sigue conquistando a los comensales.
