A punto de cumplirse cuatro años desde el final de Juego de Tronos, algunos todavía no han superado el desenlace que le brindaron los ya míticos David Benioff y D.B. Weiss a la historia que comenzaron como una adaptación de la saga de fantasía de George R.R. Martin pero que no les quedó más remedio que terminar por su cuenta cuando alcanzaron el ritmo del autor. Como suele ocurrir con cualquier gran fenómeno de masas, y Juego de Tronos lo era, la expectación ante el final fue total y absoluta y se considera uno de los grandes eventos televisivos de su década, pero, también como suele ocurrir cuando el 'hype' está demasiado alto, las posibilidades de decepción aumentan. De hecho, el desenlace fue objeto de una decepción bastante generalizada entre una parte muy importante de los fans, que no estuvieron conformes con la forma en que la serie de HBO resolvió la batalla contra los Caminantes Blancos y cómo se resolvió el complicado asunto de convertirse en Rey de los Siete Reinos.
Personalmente, tengo que decir que el final Juego de Tronos estuvo muy muy lejos de horrorizarme. Hubo algunas decepciones, claro, pero, una vez superadas algunas cuestiones que jamás imaginé a lo largo de la temporada 8, la realidad es que nunca esperé que el último capítulo fuese capaz de levantar el asunto para convertirse un final de ensueño.
Con la información que tenía en los días previos a la emisión del esperado final de Juego de Tronos en abril de 2019, que básicamente pasaba por que los Caminantes Blancos ya no eran una amenaza y que Daenerys se había convertido a la villana y había reducido a cenizas Desembarco del Rey, lo cierto es que la forma en la que Benioff y Weiss cerraron la historia me pareció la mejor dentro de las posibilidades. Un desenlace correcto con lógica para el desarrollo individual de cada uno de los personajes: La decisión de destierro de Jon Nieve era muy Jon Nieve y, sin ninguno de los posibles gobernadores aún en liza, que los más sabios y carismáticos personajes hicieran piña en torno a un rey para reconstruir el reino tengo que reconocer que me dejó mucho mejor sabor de boca que otros de los episodios que conformaron la temporada final.
Con la franquicia Juego de Tronos aún muy viva de la mano de los proyectos de HBO y con el primer 'spin-off', La Casa del Dragón, habiéndose convertido en un merecido nuevo éxito, lo cierto es que el desenlace de la famosa serie sigue siendo objeto del azote de muchos.
De hecho, tanto es así, que, como recoge el sitio web Jeaux Video, un fan ha tirado de la Inteligencia Artificial para desarrollar uno nuevo. Así lo ha compartido un usuario de Reddit en el canal dedicado a la serie r/gameofthrones, solicitó a la inteligencia artificial de moda, el ya célebre ChatGPT, que reescribiera el final de Juego de Tronos.
Y como ChatGPT no dice no a nada, la herramienta asumió la tarea de escribir un final alternativo con una trama más centrada en la batalla final entre las fuerzas de Cersei Lannister y Daenerys Targaryen y Jon Nieve. Un "original" relato que incluso se atreve a resucitar a un personaje muerto ya en el momento de comenzar la serie y que, al leerlo, nos haría que cualquier persona apreciase mucho más el original.
Puedes leerlo a continuación:
"En la batalla final por el Trono de Hierro, Jon Nieve y Daenerys Targaryen lucharon codo con codo contra las fuerzas de Cersei Lannister. A medida que avanza la batalla, queda claro que Cersei tiene un arma secreta: un poderoso dragón que ha estado escondiendo del resto del mundo.
El dragón demuestra ser un adversario formidable y toda esperanza parece perdida para Jon y Daenerys. Sin embargo, una figura misteriosa aparece en el campo de batalla, montando su propio dragón.
Ese personaje no es otro que Rhaegar Targaryen, el hermano perdido de Daenerys que se creía muerto hace muchos años. Rhaegar vivía en secreto, esperando su momento y el momento adecuado para regresar.
Con la ayuda de Rhaegar, Jon y Daenerys pueden derrotar a Cersei y reclamar el Trono de Hierro. Sin embargo, tras la batalla, surge un nuevo conflicto: Tanto Jon como Daenerys consideran que son los legítimos herederos para gobernar los Siete Reinos.
Mientras la tensión aumenta entre los amantes, Rhaegar interviene, instándoles a dejar a un lado sus intereses y a trabajar juntos por el bien común. Les recuerda que la gente en Poniente necesita al mejor líder y no otra guerra.
Conmovidos por las palabras de Rhaegar, Jon y Daenerys acuerdan gobernar juntos, como co-monarcas de los Siete Reinos. Con Rhaegar como su consejero, comienzan una nueva era de paz y prosperidad en Poniente.
La escena final muestra a Jon, Daenerys y Rhaegar juntos ante el Trono de Hierro, mientras la gente en Poniente les vitorea y celebra su victoria. Es un momento de esperanza e inspirador, uno que sugiere que incluso en un lugar oscuro y brutal como Poniente, siempre queda la posibilidad de la redención y la unión".
Un desenlace sin duda muy diferente pero que nos cuesta pensar que hubiera funcionado mejor que el original. Será mucho más interesante conocer el que ha ideado el autor de la saga, George R.R. Martin, que todavía planea publicar dos novelas más para cerrar la historia.