En 19 temporadas, los personajes de Anatomía de Grey han tenido la oportunidad de vivir muchos dramas. Entre el tiroteo en la temporada 6, el accidente aéreo en la temporada 8 o la muerte de Derek en la temporada 11, ninguno de los médicos del Gray Sloan Memorial Hospital se ha salvado de que ninguna gran desgracia le tocase de cerca.
Y si la serie es conocida por sus episodios de desastre, hay algunas tragedias bastante más íntimas que al final son las que más han marcado a los fans de la serie, por una o por otra razón. Este es el caso de la dramática historia en torno al nacimiento del primer bebé de April (Sarah Drew) y Jackson (Jesse Williams). Una tragedia que resulta aún más conmovedora cuando se sabe que está inspirada en una historia real.
En la temporada 11 de Anatomía de Grey, mientras Jackson y April esperan el que se presenta como el momento más especial y feliz de su vida, la pareja se entera de que su bebé tiene osteogénesis imperfecta de tipo 2, un síndrome mejor conocido como la "enfermedad de los huesos de cristal". Una noticia absolutamente desgarradora puesto el pronóstico de mortalidad infantil que lleva asociado condenaba por completo a su bebé aún no nacido.
Una dramática historia que uno hubiera pensado que salía directamente del cerebro de un guionista, pero que en realidad se inspiró en una experiencia vivida por Sarah Drew, la intérprete encargada de encarnar a April.
Durante la emisión del episodio, en febrero de 2015, la actriz habló en una entrevista a los orígenes de esta trama: "Conté esta historia un poco por casualidad" explicó tal y como recoge Allocine. "April y Catherine (Debbie Allen) tuvieron un debate pro-vida/pro-elección, en el que Catherine asumió que todos los cristianos creían lo mismo".
Sarah Drew había propuesto entonces esta historia, que le había sucedido a una de sus amigas, a la creadora Shonda Rhimes. Para ella, era la forma correcta de demostrar que no siempre todo era blanco o negro. "Cuando descubrí que April estaba embarazada, le pregunté a Shonda: 'Realmente vas a usar la historia que le pasó a mi amiga, ¿no es así?".
"Ella no tenía la intención, pero me dijo que era una buena idea y que iban a hacer todo lo posible para usarlo. Me emocioné mucho porque me pareció muy interesante ver cómo una pareja, compuesta por un creyente y un ateo, podría enfrentar tal escenario", explicó Drew.
Y una cosa es cierta: la conmovedora trama marcó a todos los fans de Anatomía de Grey y permitió a los guionistas abordar el tema del duelo a través de los personajes de April y Jackson.