Hubo un tiempo, no muy lejano, en el que Juego de tronos lo era todo. No había persona que no siguiera la serie. Ni tu panadero, ni tu vecina del quinto A, ni tu amigo el que no sabe ni qué es HBO: todo el mundo seguía con devoción la -quizá- última gran serie que vivimos todos de manera conjunta. Y uno de los personajes que causó más fascinación desde su primera aparición fue una bruja capaz de matar ejércitos con un movimiento de su mano: Melissandre.
Cosas de brujas
En el primer episodio de la temporada seis, la bellísima maga roja se iba a dar un baño, se quitaba el collar y aparecía ante los espectadores como una anciana. Los fans (o sea, todos) enloquecimos: ¿El collar era lo que le permitía convertirse en una bella joven y hacer sus conjuros? Desde luego, era una perspectiva interesante. ¿Pero entonces…?
¿Por qué en la temporada cuatro tomaba un baño delante de Stannis sin collar y seguía estando joven? Los seguidores más analíticos crearon mil y una nuevas teorías, pero la actriz tenía una explicación que lo soluciona todo: “Fue un momento de decir ‘oops’”. Vamos, que dos temporadas antes no sabían todavía ese dato sobre Melissandre.
“La noche es oscura y alberga horrores”, decía en un momento la hechicera roja, pero permitidnos que, visto lo visto, cambiemos un poco la frase: la serie es oscura… y alberga errores.