Crees que conoces cada detalle de Los Simpson. Que no hay una nota que se te escape en Ya lo ven y puedes recitar de memoria cualquier diálogo de las temporadas 1 a la 9. Usas en tu día a día expresiones como “El yogurlado también está maldito”, “No conquistas nada con una ensalada” o “Por el alcohol, causa y a la vez solución de todos los problemas de la vida”. Y sin embargo, siempre hay algo que te sorprende.
D’oh!
Nos vamos hasta 1995, cuando se estrena uno de los mejores episodios de la serie, Y con Maggie tres, en el que Homer y Marge le cuentan a Bart y Lisa cómo llegó la pequeña de la casa a la familia justo cuando él acababa de conseguir su trabajo de ensueño en la bolera. Es emotivo, es gracioso, es fabuloso… Y tiene un error increíble.
Cuando Marge y Homer están hablando de si deben tener una nueva hija, ¡ya hay una foto de Maggie colgada de la pared! Lo mejor es que en 23 años nadie pareció darse cuenta hasta que el propio Matt Selman, productor de la serie, lo indicó en Twitter. A eso se le llama fe de erratas en toda regla.
El episodio fue el primero escrito por Jennifer Crittenden, que después se pasaría a Seinfeld, Veep y Todo el mundo quiere a Raymond. Y, desde luego, este fallito no ha hecho que el episodio deje de ser uno de los favoritos de todos los espectadores… aunque solo sea por ese final con Maggie quitándose el chupete y diciendo “Papi”. Ya estamos llorando.