En nuestro país ha pasado completamente desapercibida, pero, si te gusta la ciencia ficción, en el catálogo de Netflix te está esperando una serie completamente nueva, que plantea una premisa de lo más interesante y que además puedes devorar en apenas cinco horas. Aunque en España probablemente no hayas escuchado hablar de ella, a triunfado por completo a muy pocos kilómetros de aquí. Se llama Vórtice y, al más puro estilo La Caza de RTVE, llegó a Netflix apenas unos meses después de haber cautivado a los espectadores en su emisión original en la televisión pública francesa.
Así lo avala la puntuación de 4,1/5 estrellas que le han otorgado los lectores de nuestra web hermana Allocine, que coinciden en destacar que Vórtice es una serie "adictiva" y "cautivadora de principio a fin", y también en alabar el trabajo de su actor principal, Tomer Sisley, un famoso actor francés que derrocha carisma en su país.
Sin embargo, aunque su llegada a Netflix el pasado mes de junio fue una excelente noticia en Francia, su incorporación al catálogo en España ha pasado sin pena ni gloria. Pero nunca es tarde: sus seis episodios están disponibles al completo para los suscriptores de la plataforma y su combinación de 'thriller' con ciencia ficción tiene potencial de sobra para hacer las delicias de más de uno.
Ambientada en un futuro cercano, año 2025, Vórtice nos presenta la historia de Ludovic Beguin, un capitán de la policía judicial de Brest que hace 27 perdió al amor de su vida y madre de su hija, Mélanie, en lo que pareció ser un accidente. Ahora, el agente está a punto de revivir el traumático suceso que cambió su vida y la de la pequeña Juliette y tiene la posibilidad de que nunca ocurra.
Los grandes avances tecnológicos de los últimos años han permitido que las escenas del crimen puedan ser recreadas en realidad virtual, lo que conlleva que los investigadores tengan la posibilidad de moverse libremente por ellas para comprender mejor lo que le sucedió a la víctima y permite recabar información clave para el caso. Y eso es lo que se dispone a hacer Ludovic con el hallazgo del cadáver de una joven en la misma playa en la que falleció su esposa cuando una grieta espacio-temporal se produce en la realidad virtual y reencuentra a Ludovic con Mélanie. Ella está aún en 1998 y él en 2025, pero todavía quedan once días para que se produzca su muerte.
Frente a sí Ludovic tiene la oportunidad de lo que nunca pensó que sería posible: salvar la vida de Mélanie. Sin embargo, al mismo tiempo, cada uno de sus movimientos sobre el pasado tiene unas consecuencias sobre el presente y corre el riesgo de perder su vida en el presente, la que tanto tardó en reconstruir: su nueva esposa, Parvana y su hijo Sam. Un efecto mariposa que plantea una situación absolutamente descorazonadora para el protagonista.
Un constante ir y venir entre pasado y presente cargado de emociones que al mismo tiempo también ofrece una investigación compleja y cautivadora que mantiene a los espectadores en vilo hasta la revelación final.
La serie ha sido considerada como una de las grandes sorpresas del año en nuestro país vecino, donde ya se habla sobre una posible segunda temporada que no ha sido descartada por completo, pero que de momento no está prevista.