Conocimos a Zac Efron gracias a su papel de Troy Bolton en High School Musical cuando apenas tenía 20 años. 15 años después, su físico ha cambiado. Ya no es ese niño de cara angelical, pero no es lo único. A su madurez natural hay que añadir un suceso que casi le cuesta la vida y que ha sido foco de todo tipo de rumores. Zac Efron se rompió la mandíbula en 2013 y le transformó en una persona muy diferente (físicamente).
Efron se encargó de relatar él mismo el suceso durante una aparición en Jimmy Kimmel Live en enero de 2014. "Estaba corriendo por mi casa y me caí de cara", cuenta el actor, que por aquel entonces tenía 25 años, "Tengo una fuente en mi casa, lo que es genial, ¿no? Estaba corriendo, me resbalé con el agua y me golpeé la barbilla en la fuente de mi casa".
La herida no solo requería un par de puntos, sino que era mucho más. Quedó inconsciente y, cuando despertó, encontró que el hueso de su barbilla estaba colgando. "Tras la operación, tuvieron que cerrar su boca con alambre y pasó las siguientes seis semanas sin poder hablar o comer. "Estuve bebiendo alimentos durante seis semanas, solo cosas líquidas. Perdí entre 4 y 5 kilos", desveló a Jimmy Kimmel.
Eso no es nada comparado con las fatales consecuencias que podría haber tenido el golpe. En una entrevista con ET confirmó que la caída podría haber sido mortal.
Es curioso. Apesta. Casi muero, pero estamos bien
Las secuelas de la caída 10 años después
La cirugía fue bastante invasiva y modificó por completo su rostro, pero lo peor es que las verdaderas consecuencias no se han notado hasta un tiempo después. En abril de 2021, Efron apareció en un especial de Bill Nye por el Día de la Tierra y su mandíbula aparecía tan hinchada que internet se llenó de comentarios sobre una posible cirugía plástica. Según comentó en Men's Health poco después, todo viene a raíz de la reconstrucción facial a la que fue sometido. Al parecer, varios músculos de su cara se vieron afectados por la lesión y los músculos interiores y la mandíbula tuvieron que compensarlo.
El actor trabaja con un especialista para solucionar ese problema. "Los maseteros -los que utilizamos para masticar- simplemente crecieron. Se hicieron muy, muy grandes", confirma. El público, que no sabía nada de esto, quedó alarmado y hasta la madre de Efron llamó al actor para preguntarle si se había hecho la cirugía plástica.
El revuelo que se armó fue grande, pero Efron pasó por completo de ello. Vive al margen de las redes sociales y es justo eso lo que le ha salvado del peor lado de la fama. "Realmente no me importa una mierda", reconoció en una entrevista con Entertainment Tonight, "Me avisó mi madre, yo realmente no leo nada en internet. No me importa una mierda". Entiende que por el camino que habían tomado los rumores quizás debía decir algo, pero no se sentía demasiado obligado a desmentir nada.