La temporada 6 de The Crown pondrá el broche de oro a la exitosa serie británica sobre la Reina Isabel II de Inglaterra el próximo 14 de diciembre con el estreno de su segunda parte en el catálogo de Netflix. Sin embargo, a no ser que los seis episodios restantes den la sorpresa, parece que podría hacerlo con un sabor algo agridulce, puesto que la última entrega de la ficción histórica desarrollada por Peter Morgan ha resultado ser la peor valorada de su trayectoria por parte de la crítica. Los espectadores, según parece, se siguen rindiendo a los pies de la que sin duda es una de las series estrellas del servicio de 'streaming', que en estos primeros cuatro episodios ha puesto el foco sobre la relación de Ladi Di (Elizebeth Debicki) y Dodi Al Fayed y la trágica muerte de ambos en un accidente de tráfico en París mientras eran perseguidos por los paparazzis.
Aunque la segunda parte de la sexta temporada de The Crown aún tendrá que profundizar más en las consecuencias de la muerte de la Princesa de Gales y la fuerte conmoción que ocasionó su pérdida tanto en la sociedad británica como en el resto del mundo, el equipo de la serie de Netflix se ha tenido que tomar algunas licencias en torno a la historia real, puesto que el dramático suceso, pese a todas las especulaciones y teorías conspiratorias que surgieron en su día y se han mantenido hasta día de hoy, siempre estuvo marcado por una gran discreción y privacidad por parte de la Casa Real británica.
Así, detalles como la manipulación de Mohammed Al Fayed para que su hijo y Diana terminaran juntos, la propuesta de matrimonio rechazada por la Princesa a escasas horas del accidente, la conversación entre la Reina Isabel y Felipe de Edimburgo sobre el tratamiento de Lady Di en el funeral o su último encuentro con el Príncipe Carlos, entre otros, son elementos introducidos libremente por la serie sin que haya ninguna evidencia de que ocurriesen en la historia real.
Las libertades que ha tenido que tomarse The Crown' en la temporada 6: no hay pruebas de que ninguna de estas cosas sucedieran en la vida realNo obstante, al tiempo que introduce o modifica algunos sucesos no evidenciados, la serie también omite otros que no solo es más fácil identificar sino que también son menos comprensibles porque sí hay una historia real confirmada que justificaría su presencia.
Uno muy identificable es la historia de amor de Diana Spencer con el Doctor Hasnat Khan, un reputado cirujano británico-pakistaní que fue mucho más importante en la vida de Lady Di de lo que parece ser en la serie de Netflix. Interpretado por Humayun Saeed en la quinta temporada, la relación de la Princesa con el médico se pasa bastante por encima y solo se aborda durante dos episodios de la ficción, mientras que, en la vida real, ambos estuvieron juntos más de dos años.
De hecho, la relación amorosa que existía entre la pareja era tan fuerte que se dice que Hasnat Khan era el verdadero amor de Diana y que, de hecho, incluso habían planeado casarse tras haber conocido a sus respectivas familias. Sin embargo, finalmente rompieron ante la dificultad de llevar una relación normal, apenas unas semanas antes de la muerte de Diana. Según relataría él a la policía según lo recogido por Vogue UK, la noche antes de que ella se fuera al viaje a Saint Tropez con Al Fayed habían estado juntos. Durante ese viaje, Diana comenzó su relación con Dodi y, a su regreso, rompió con Hasnat Khan aunque, según se ha dicho siempre su entorno, seguía enamorada de él. En la serie habían roto antes de aquel viaje, pasando mucho más por encima su relación.
"El amor de su vida era Hasnat, no Dodi, que murió con ella y con quien había tenido una relación de 30 días. Creo que si el accidente no hubiera pasado, ella hubiera reavivado su relación con Hasnat", contaría el mayordomo de Diana Paul Burrell. Hasnat, por su parte, siempre ha mantenido todos los detalles y razones de su ruptura en absoluto secreto.
