Han pasado 18 años desde que Embrujadas se despidió para siempre con su octava temporada y 178 episodios a sus espaldas, pero la famosa serie de WB y su inolvidable Poder de Tres sigue muy presente en nuestra memoria. Además, en las últimas semanas la ficción ha vuelto a estar bajo los focos después de que se haya reavivado el fuego de un conflicto que no solo nunca llegó a resolverse, sino que se había mantenido bastante tapado durante más de dos décadas.
No es nada nuevo que, de las cuatro actrices que interpretaron al núcleo fuerte de las hermanas Halliwell, dos experimentaron una experiencia bastante negativa que las ha marcado de por vida, pero ahora están señalando directamente a la fuente de sus problemas: Alyssa Milano, la encargada de dar vida a Phoebe Halliwell. Frente a ella, las tres restantes: Shannen Doherty (Prue), despedida como víctima del supuesto ultimátum que Milano hizo a la productora, Holly Marie Combs (Piper), que siguió en la serie pero ha revelado que aquella amenaza sin duda sí se produjo, y Rose McGowan (Paige), quien tras entrar como la sustituta de Doherty también dice haber sufrido el ambiente tóxico generado por Milano.
Sin embargo, de lo que muchos no se acuerdan es que en la recta final hubo una quinta bruja: Billie Jenkins, interpretada por una jovencísima Kaley Cuoco que venía de No sin mis hijas pero aún no había conseguido el papel en The Big Bang Theory que le cambiaría la vida.
La también protagonista de The Flight Attendant no se ha pronunciado sobre la polémica y parece poco probable que lo haga, pero no hace mucho, en 2020, compartió sus buenos recuerdos sobre el comportamiento de Alyssa Milano cuando se incorporó al elenco. En aquel momento, según recordaba Cuoco, estaba muy nerviosa por incorporarse a una serie que ya llevaba siete temporadas a sus espaldas y que encima estaba encarando su recta final:
"Para mí es un trauma real con el que he vivido mucho tiempo": Shannen Doherty le aclara a Alyssa Milano el daño que le hizo en 'Embrujadas'"Nunca había visto un episodio", admitió en su entrevista con el podcast de Dax Shepard 'Armchair Expert' en 2020. "Estuve un año en Embrujadas y estaba aterrorizada de unirme. Era abrumador tener 21 años y entrar ahí. Era la chica nueva y ellas habían estado ahí siete años".
Mi primer día de trabajo tuve que ir por la tarde para una sesión de fotos después de que ellas hubieran estado rodando toda la mañana. Llegué en el descanso de la comida y estaba aterrorizada hasta el punto de querer llorar
"Entré en la sala de maquillaje y ellas estaban sentadas comiendo. Las miré y las saludé con la mano. Entonces Alyssa se levanta, salta sobre el sofá, me rodea con los brazos y me dice: 'Bienvenida a nuestra serie. Estoy muy feliz de que estés aquí'. Sé que no suena gran cosa, pero lo cambió todo", reflexionaba Cuoco sobre lo importante que fue aquel momento para ella. "Nunca olvidaré que ella hizo eso cuando yo estaba tan asustada. Probablemente ella ni siquiera recuerde ese momento, pero yo lo haré para siempre".
Escuchando a Cuoco, parece poco probable que comparta la misma opinión que el resto de sus compañeras.
No obstante, aunque aquella buena acogida hizo que Cuoco estuviera más cómoda, adaptarse a su personaje fue otro reto. Los poderes de Billie eran la telequinesis y posteriormente también la proyección y la capacidad de deformar la realidad, pero, en una serie en la que la magia cobra un papel tan fundamental, había escenas realmente exigentes, especialmente cuando había que "volar" por el set, tal y como recordaba para el podcast.
Pensé que iba a ser fácil, pero no lo fue. Me enredé en los cables tantas veces al hacer mis piruetas que casi me estrangulé
"Pero lo intenté, lo intenté mucho", aseguraba Cuoco.
Tras una temporada de 22 episodios, Kaley Cuoco despidió para siempre Embrujadas junto al resto del reparto en 2006 y apenas un año más tarde estaría estrenando la serie que la convertiría en la actriz mejor pagada de la televisión durante años.