La maldición de las adaptaciones de videojuegos ha caducado. Después de producciones olvidables, como Assassin's Creed, los estudios parecen haber encontrado el modo de respetar la esencia de los juegos y por fin están estrenando grandes títulos. Ya sucedió con The Last of Us a comienzos del 2023 y ha vuelto a pasar con Fallout, la última gran aportación a este subgénero.
8 episodios conforman la primera temporada de este mundo postapocalíptico que tantas ganas teníamos de ver en pantalla. Después de ver el genial resultado -y de manera inevitable-, pensamos en otros proyectos que hay en marcha y, como ocurrió con Fallout en su día, provocan dudas. Uno de los más delicados es Bioshock, un videojuego que llevan 16 años queriendo adaptar y que parece que por fin verá la luz de la mano de Netflix.
Una idea que lleva 16 años en desarrollo
Bioshock es un videojuego que se desarrolla en la ciudad submarina ficticia de Rapture, la cual ha quedado estancada en la década de los 60. Este lugar es el resultado de un experimento científico que condujo a un rápido desarrollo en ingeniería y biotecnología. Con el paso del tiempo, los habitantes de Rapture, descontentos por las diferencias sociales, desencadenaron una rebelión contra los gobernantes que hizo colapsar el sistema.
Es una franquicia que consta de tres entregas, una historia compleja y un universo especialmente difícil de trasladar a la pantalla. Quizás por eso se están tomando con calma la tarea y ya van 16 años desde que Take-Two anunció que iban a producir una película de Bioshock dirigida por Gore Verbinski (Piratas del Caribe). Como imaginarás, los planes desde entonces han cambiado un poco y Verbisnki ya no está involucrado.
Lo último que se conoce es que, en febrero de 2022, Netflix anunció que estaba desarrollando la película con la idea de convertirlo en un universo cinematográfico. En ese momento Francis Lawrence (Soy leyenda, Los juegos del hambre) había firmado para dirigir la producción con un guion de Michael Green, el mismo que se ha encargado de Samurái de ojos azules, una de las series de Netflix mejor puntuadas del 2023.
A partir de ahí, ¿qué podemos decir? La huelga de guionistas que se prolongó durante cerca de cuatro meses en 2023 ha influido en su retraso y, según declaró el presidente de Netflix en una entrevista con Collider, Scott Stuber, ha dejado de ser una película para convertirse en serie.
Estamos esperando el guion. Estamos en esa fase, la huelga nos ralentizó bastante. Hay audiencias enormes, pero esto no siempre se traduce, e históricamente, como industria, lo hemos arruinado bastante, pero ambos [Bioshock y Gears of War] tienen mundos realmente ricos, realmente buenos personajes, por lo que son transiciones muy naturales a la pantalla y al cine
Nada en firme por el momento, pero está confirmado que continúan adelante con el desarrollo y que es cuestión de tiempo que llegue al catálogo de Netflix.