Mi reno de peluche, la nueva miniserie que acaba de estrenarse en Netflix y que ya está siendo señalada como una de las mejores producciones televisivas de 2024, consta de siete episodios con una duración de entre 30 y 40 minutos, así que los espectadores apenas necesitan un total de 4 horas para verla al completo. Sin embargo, la historia que su creador y protagonista, Richard Gadd, relata en ella, permanece con nosotros durante más tiempo. No es fácil sacársela de la cabeza.
Aunque el punto de partida de Baby Reindeer -su título original- es el acoso que comienza a sufrir su protagonista, el aspirante a humorista Donny Dunn (Gadd), por parte de una clienta del pub en el que trabaja tras haberla invitado al refresco, la historia que relata la serie trasciende por completo a lo maniqueo. El guionista Richard Gadd cuenta en ella una experiencia traumática y real que vivió en sus propias carnes durante más de cuatro años, pero también explora otras facetas y traumas recientes que afectan directamente a cómo Donny aborda la compleja y peligrosa situación.
La serie no sitúa a acosadora y víctima en términos de malos y buenos, sino que apuesta por profundizar en la psicología de los dos personajes, algo que era muy importante para el guionista ya en el momento de desarrollar la obra de teatro que popularizó y que vuelve a estar definitivamente presente en la serie de Netflix. Gadd, que siempre ha protegido la verdadera identidad de su acosadora, presenta a Martha también como una víctima y sin culparla por sus acciones, que se producen como resultado de sus problemas de salud mental que el sistema no la ha ayudado a afrontar.
El final de 'Mi reno de peluche'
En el final de Mi reno de peluche, tras conseguir una grabación en la que Martha amenaza con violencia física tanto a Donny como a sus padres, Donny consigue que finalmente que se puedan emprender acciones legales contra ella. Finalmente, Martha es condenada a 9 meses de prisión y se le impone una orden de alejamiento, aunque en la vida real solo ocurrió lo segundo.
Tras ello, en el final definitivo de la serie,´vemos cómo Donny escucha algunos de los miles de mensajes de voz que le dejó Martha en su buzón de voz, algo que ha estado haciendo para reconfortarse y demostrando que no se había desprendido del todo de la curiosidad que sentía por ella pese a la pesadilla que le había hecho vivir. En el mensaje que escucha, Martha le explica con cariño porqué le recuerda su reno de peluche, el muñeco con el que encontraba consuelo cuando era pequeña.
Conmovido hasta las lágrimas, Donny es en ese momento invitado por un camarero a su bebida cuando no la puede pagar, rememorando el momento en que su amabilidad con Martha lo comenzó todo.
Una ambigüedad buscada
Con el desenlace del séptimo episodio, Donny cierra el círculo en una posición similar a Martha al comienzo de la serie, de nuevo difuminando la línea que separa a Donny y Martha en una dinámica tóxica alimentada por sus pasados traumáticos.
Un desenlace que consigue la ambigüedad que Richard Gadd buscaba para su historia y a la que no quiere dar ningún significado:
"Me gusta bastante la ambigüedad del final, no quiero darle ningún significado", asegura en entrevista con Radio Times. "Creo que se puede interpretar de muchas maneras diferentes. Sé lo que tengo en la cabeza: ese final es lo que más me gusta de toda la serie, la forma en que termina . Desde conectar los auriculares hasta llegar hasta el final, escuchar el mensaje de voz, mirar hacia arriba, esa es mi parte favorita de toda la serie. Creo que se puede interpretar de múltiples maneras y me gusta que así sea. Tengo muchas ganas de ver qué piensa la gente en realidad".
