Fue un fenómeno como pocos en la industria televisiva, pero tras el final de Juego de Tronos y la decepción de una parte importante de la audiencia, lo cierto es que pasar página por un tiempo y no mostrar demasiado interés por nada que tuviera que ver con Poniente fue una actitud bastante generalizada. Sin embargo, La Casa del Dragón y su adictiva primera temporada ha hecho resucitar esa sangre y ese fuego, y, en definitiva, la pasión por el universo de fantasía creado por George R.R. Martin y sus conflictos de poder repletos de intrigas familiares y dragones.
Nos hemos rendido a los pies de Rhaenyra, Alicent, Daemon y compañía y esperamos con ganas el estreno de su segunda temporada el próximo mes de junio, cuando podremos seguir explorando uno de los episodios que marcaron un antes y un después en la historia de los antepasados de Daenerys, la inolvidable Madre de Dragones que protagonizó la serie original.
Ahora es imposible pensar en Daenerys sin que nos venga a la cabeza la imagen de Emilia Clarke caracterizada como el personaje, pero, si te gusta Juego de Tronos seguramente sepas que el primer episodio de la inolvidable serie de HBO no fue exactamente el primero, sino que previamente se había rodado otro capítulo piloto que no terminaría de convencer por una serie de razones y que conduciría directamente a que fuese rehecho por completo. Un episodio en el que, entre otras cosas, era otra actriz la que interpretaba a la también apodada khaleesi.
Entonces nadie imaginaba que estábamos ante el mayor fenómeno televisivo de todos los tiempos, pero en la primera versión de 'Winter is Coming' (1x01) el personaje de la Madre de Dragones estaba interpretado por otra actriz: Tamzin Merchant. Una joven que, tras rodar ese primer piloto fallido en Marruecos, abandonó el proyecto una vez que la serie retomó el trabajo en el set para la producción de un nuevo episodio al completo que convenciera más a todos. Aunque la mayoría de miembros del elenco conservaron sus papeles, el equipo liderado por David Benioff y D.B. Weiss seleccionó a la carismática Emilia Clarke para el papel de Daenerys, una actriz entonces desconocida que adquiriría fama mundial con el personaje y experimentaría un auténtico despegue en su carrera artística.
Como curiosidad, en aquel primer episodio participó también el propio George R.R. Martin, quien interpretaba a uno de los asistentes a la boda de Daenerys y Khal Drogo, cosa que no hizo en el segundo piloto.
Pero volviendo a Tamzin Merchant, a quien no dentro de mucho veremos de nuevo en su papel en la recién cancelada serie de Amazon Carnival Row, aunque lo que cualquiera pensaría es que la joven lleva más de una década tirándose de los pelos, la realidad es que no se arrepiente en absoluto de su decisión. Sobre ello habló ella misma a principios de 2021 con Entertainment Weekly, con motivo de la publicación de su primer libro.
"Rodar ese piloto fue una gran lección. Fue una afirmación sobre escuchar mis instintos y seguirlos, porque traté de salir de esa situación y, en el proceso de contratación, lo hice", recuerda Merchant sobre el rodaje del episodio, cuya primera versión incluía más desnudos y sexo de lo que finalmente incluiría el capítulo protagonizado por Emilia Clarke, y sobre la necesidad que tuvo de bajarse del carro en cuanto tuviese la oportunidad.
Algunas personas persuasivas me convencieron. Entonces me encontré a mí misma desnuda y asustada en Marruecos y cabalgando un caballo que estaba claramente mucho más emocionado de estar allí de lo que yo lo estaba
"Me sirvió como aprendizaje de que si mis tripas me están contando una historia que no es algo que esté emocionada por contar, entonces no debería estarlo simplemente porque otros me digan que debería estarlo", explicaba. "No tenía ningún entrenamiento como actriz, solo mi instinto. Lo que emociona y lo que me mueve es una historia y un personaje convincentes. Y para mí, Juego de Tronos nunca lo fue. Creo que pertenece a Emilia Clarke el hacer ese papel icónico, y ella obviamente estaba emocionada por contar esa historia, y estuvo épica e increíble. Pero, para mí, no estaba en mi corazón contarlo".
Sin embargo, aunque para Merchant dejar de ser Daenerys supuso un alivio, fuentes del libro 'Fire Cannot Kill a Dragon' relataban que la decisión de apartarla de la serie fue "la llamada de teléfono más dura que tuvieron que hacer los productores". Según se señalaba desde el equipo, aunque el trabajo de la joven actriz era bueno, sus escenas con Drogo no funcionaban, sencillamente. Por suerte, Merchant no solo se lo tomó bien, sino que cree que es lo mejor que le pudo pasar: "Creo que si me hubiera tenido que subir a ese carruaje dorado, si no hubiese sido liberada de mi contrato, eso me hubiera llevado a un lugar muy lejano al de la persona creativa que soy ahora", asegura. "Si fuera rica y famosa, no hubiera tenido tiempo de hacer todas las cosas que mi alma necesita".
