La inolvidable Juego de Tronos nos había acostumbrado a una temporada por año y, aunque con La Casa del Dragón hemos tenido que esperar un poco más, la segunda entrega de la precuela del fenómeno de fantasía de HBO ya está a la vuelta de la esquina. Debutará en la plataforma de 'streaming' Max el próximo lunes 17 de junio con el capítulo 'A son for a son' (2x01), y la emisión, al igual que con la primera entrega será semanal. La temporada 2 de La Casa del Dragón tendrá, eso sí, dos episodios menos, puesto que serán 8 frente a los 10 de la primera, de aproximadamente una hora de duración.
Sorpresa absoluta en 2022, la primera serie dentro del universo del mundo creado por George R.R. Martin para su Canción de hielo y fuego tras el éxito de Juego de Tronos fue recibida con tanta emoción como escepticismo. Habían pasado tres años del final de la serie original, que no había satisfecho a una parte importante de la audiencia, y había dudas respecto al resultado de una nueva serie ambientada en Poniente. Al mismo tiempo, La Casa del Dragón partía con la medalla de haber sido el único de los varios proyectos propuestos que había conseguido la confianza de la cadena.
Y la serie consiguió su objetivo: resucitar la emoción de los espectadores por una nueva historia en un universo que ya conocíamos, sabiendo mantener la esencia de lo que hizo de Juego de Tronos una de las mejores series de la historia.
"No me esperaba nada, pero La casa del dragón fue sorprendente", admite el director de SensaCine Alejandro G. Calvo en su crítica de los dos primeros episodios de la segunda temporada de La Casa del Dragón. "Estaba realmente bien planteada pese al desafío que suponía, que era que el espectador de repente tuviera que conocer a un montón de nuevos personajes. No jugaba la carta fácil de coger personajes de la serie principal y ponerlos en otra aventura. Aquí lo que se presentaba era una nueva genealogía, siglos antes, cuando los Targaryen eran los reyes de Poniente y la serie era ambiciosa porque presentaba un rico espectro de personajes con los que debías empatizar con cierta urgencia. Sin embargo, los libros de George R.R. Martin lo que te exigían era paciencia, para ir conociendo poco a poco a todo el mundo".
'La Casa del Dragón' supo encontrar el equilibrio: supo tener la urgencia pero también supo tener la paciencia. Y funcionó
Respecto al comienzo de la temporada 2 de La Casa del Dragón, los nuevos episodios empiezan donde los dejó la primera: Rhaenyra (Emma D'Arcy) acaba de perder a uno de sus hijos y "Aunque la primera secuencia es en el Muro, con la Guardia de la Noche, luego rápidamente volvemos a los lugares donde tiene lugar el conflicto". Por un lado la capital, Desembarco del Rey, con Alicent (Olivia Cooke) y el Rey Aegon (Tom Glynn-Carney) afianzando su derecho como legítimo heredero al Trono de Hierro; y por otro Rocadragón, de donde Rhaenyra Targaryen reclama su condición de heredera y legítima Reina de Poniente.
"Dirigen Alan Taylor y Claire Kilner, dos viejos conocidos de Juego de Tronos y de La Casa del Dragón, quienes se conocen los códigos y hacen que las cosas funcionen", señala G.Calvo.
"[Los dos primeros episodios de la temporada 2] Es un poco Villaarriba y Villabajo, es un poco Hatfields & McCoys ahora mismo. Hay un beef entre los Targaryen que ocupan el trono y los que no, y ambos bandos vienen acusando las cosas superbestias, terribles y dramáticas que pasaron en la primera", explica a modo resumen, pero admitiendo que "en estos dos primeros episodios sobre todo hay conversaciones palaciegas y conspiraciones" con las acción centrada en cuatro personajes principales: Rhaenyra, Alicent, Otto Hightower (Rhys Ifans) y Daemon Targaryen (Matt Smith). "Ellos van a vehicularnos" por una temporada que "todavía no sabemos si va a ser tan buena" pero que sin duda promete y ya tiene garantizado el ser la gran serie del verano.
