Si has visto Siempre el mismo día (One day), solo con escuchar el título de la serie es muy probable que tu corazón se encoja. La historia de amor entre Emma y Dexter no termina de la mejor forma posible y, quienes la han visto, no ha podido resistir derramar una lagrimita en su episodio final. Sin embargo, la peor parte se la ha llevado Leo Woodall, el actor que protagoniza la miniserie, quien tuvo que vivir todo el drama en primera persona: "Fue muy duro".
El actor ha formado parte del apartado de entrevistas Actors on Actors de Variety, medio que ha aprovechado para sentar a charlar a dos grandes estrellas del momento: Woodall y Nicholas Galitzine. Ambos intérpretes han protagonizado dos de los títulos más famosos de este año en cuanto a plataformas online se refiere: Siempre el mismo día y La idea de tenerte, respectivamente.
Durante su encuentro, Galitzine ha preguntado a Woodall cómo logra desprenderse de sus personajes al finalizar un proyecto. "Desprenderme de Dexter no fue tan difícil, los últimos días solo sufría. Como la escena en la que está en el trastero, las cosas de Emma están ahí... Cosas como esa, quieres quitártelas de encima inmediatamente. Así que, en cuanto acabamos el rodaje, me iba desprendiendo de ello por el camino", explica el actor, después de bromear diciendo que su acento en The White Lotus sí fue más difícil de olvidar.
La escena a la que hace referencia se produce al final de la miniserie de 14 episodios, cuando Dexter se entera de que Emma ha fallecido y se encuentra desbordado de emociones. En ese momento, decide sentarse a beber en el trastero y, mientras llora, imagina a Emma (Ambika Mod), quien aparece unos segundos para que ambos personajes puedan despedirse.
Una obra maestra de Netflix para algunos y un desastre absoluto para otros: la miniserie que conmovió y molestó a los espectadoresVivir un verdadero duelo ante la cámara
"Hubo diferentes momentos en la vida de Dexter en los que tuvimos que pasar por un duelo o, al menos, por situaciones realmente duras. A veces es muy complicado. A veces no lo es. No sé tú, pero cuando yo leo un guion y dice que 'el personaje se echa a llorar', pienso: '¡Mierda!'. A veces es súper incómodo", continúa explicando a Galitzine antes de aventurarse a recordar cómo fue rodar el adiós final.
De hecho, la escena de la que he hablado, la del trastero, no había visto a Ambika durante una semana. Y era una locura que no nos hubiésemos visto, con todo lo que grabábamos. Me senté en la habitación, empezamos a grabar, porque parte de la escena es él solo consigo mismo y después ella aparece y desaparece. Solo éramos yo y Andrew Baindridge, el operador de cámara, siendo muy silenciosos. De repente, escuché susurrar: 'Vale, Ambika, ve'. Ella entró silenciosamente, se sentó a mi lado y eso fue muy duro. Como Dexter, dolió muchísimo
El protagonista de La idea de tenerte valora la valentía del director y de su compañera de reparto al ayudarle a vivir de manera tan emotiva ese abrupto final. "Fui muy afortunado. Sabíamos que nos estábamos metiendo en un proyecto muy grande, así que queríamos apoyarnos el uno al otro. Creo que ha marcado mucho la diferencia tener una buena relación", confiesa Woodall sobre cómo fue trabajar con su compañera en la serie.
Esta historia se basa en la novela homónima de 2009 de David Nicholls y fue llevada a la gran pantalla con anterioridad, aunque en forma de largometraje, con Anne Hathaway y Jim Sturgess como protagonistas. Ahora, tenemos la oportunidad de recorrer la vida de Emma y Dexter a lo largo de 20 años, pero siempre el mismo día.