Ana de Armas (Santa Cruz del Norte, Cuba, 1988) disfruta mucho más ahora que Nerea, su personaje en 'Hispania', está en el lugar donde pertenece. Si en la primera temporada la ex de 'El Internado' tenía que vestir delgadísimas túnicas y ejercer de esclava, en los nuevos capítulos (todos los martes a partir de las 22.00 horas) por fin se ha reencontrado con su gran amor, Paulo (Juan José Ballesta), y se está convirtiendo en una "guerrera total". Además, para satisfacción de la actriz, cada día hace algo distinto: atender un parto, matar a un enemigo o practicar con la falcata. Escueta pero sincera, De Armas desmiente que esté solicitadísima ("Tampoco me llegan diez guiones al día ni mucho menos") y confiesa que seguirá en el éxito de romanos de Antena 3 mientras le siga llenando.
En el capítulo del martes 24 de mayo, titulado 'Altea', la llegada de Galba (Lluis Homar) al campamento hará que todo vuelva a ser como antes. O casi. Claudia (Nathalie Poza) y Marco (Jesús Olmedo) intentarán esconder su relación, Viriato (Roberto Enriquez) tomará una decisión que podría romper su amistad con Darío (Alfonso Bassave) para siempre y Aldara (Juana Acosta) verá peligrar su vida en Caura, sobre todo ahora que Nerea empieza a sospechar de ella.
Estás mucho más guerrera en esta segunda temporada...
Más guerrera no. Guerrera total. Soy libre por fin. Me han rescatado y me han traído de Roma tras pasar allí nueve meses y ahora me toca devolver a todos los hispanos rebeldes lo que han hecho por mí.
¿Cómo te has sentido actuando con más acción?
Bien, muy bien. Es muy divertido. La falcata pesa mucho y te salen ampollas en los dedos pero bueno...
¿Más divertido que hacer de esclava y que te maltraten todo el día?
Mucho más divertido... Estoy supercontenta de estar en Hispania y nunca había estado. Siempre digo que el personaje necesitaba vivir en su sitio real. Empecé la serie en el lado romano y tenía la sensación de que echaba de menos algo que no sabía cómo era.
Nerea (Ana de Armas) junto a su amor Paulo (Juan José Ballesta).
Y mejor desde un punto interpretativo también es, ¿no?
Sí, tiene otras cosas. La temporada pasada Nerea tenía odio, desesperación... Estaba muy apagada, en un mundo muy retorcido... Ahora está siendo ella y es libre en todos los sentidos. Estoy con la ropa que tengo que ir, no con esos vestidos y esos pelos, y tampoco con esos sentimientos. Disfruto de la que hubiera sido mi vida real si no hubiera pasado nada. No recuerdo ninguna secuencia de la temporada pasada en la que sonriera a no ser que fuera por ver a Paulo y luego ponerme de nuevo a llorar.
Bueno, pero ahora ya estás con él...
Son dos jóvenes que se aman, claro. Una vez que se han encontrado, ahora va a ser muy bonito verlos luchar. Y en una batalla pueden matarme y ahí sí que nos separaríamos para siempre...
Lo malo es que va a ser un poco machista y no va a llevar nada bien que quieras luchar...
Un poco sí, pero me defiendo y consigo que me entienda explicándole lo que siento. Yo también tengo necesidad de luchar por mi pueblo.
En la segunda temporada, Nerea vuelve a Hispania tras pasar nueve meses en Roma.
Los nuevos capítulos son más oscuros, más adultos y también contienen más escenas de sexo. ¿Vas a protagonizar alguno de estos momentos? Ana Rujas o Juana Acosta ya lo han hecho.
Todavía no y no creo que me toque hacerlas (Risas). Ahora estoy con los hispanos y estoy salvada de toda esa perversión (Risas).
¿Con qué faceta de tu personaje te sientes mejor? ¿Mejor la vida en Roma o esta?
Las dos las he disfrutado pero estoy mejor aquí. Me muevo en más sitios. Antes sólo grababa en la tienda del pretor Galba y algún que otro exterior al salir o entrar de ella. Y aquí tengo otras cosas y es como un parque de atracciones. Un día cojo la falcata, otro día mato a alguien, otro día monto a caballo, otro ayudo a parir a Helena (Manuela Vellés)... Es una aventura y es mucho más rico.
¿No vas a echar de menos las confabulaciones que tenías con Sabina (Ángela Cremonte)?
No, no las voy a echar de menos.
"Grabar en el lado hispano es como estar en un parque de atracciones. Un día cojo una falcata, otro día mato a alguien, otro día monto a caballo, otro ayudo a parir a Helena", explica la actriz.
Y el éxito de 'Hispania'... ¿Te lo esperabas?
Sí, sí... Se venía venir... Cuando te dicen cómo tienen pensado hacerlo, los actores que van a participar en la serie... Ahí te imaginas que más o menos puede funcionar. De Lluis Homar aprendí muchísimo la temporada pasada y esta lo mismo con Roberto Enriquez.
¿Crees que supone un antes y un después en tu carrera? ¿Es un empujón para otros proyectos?
No sé... Yo no hago las cosas pensando que me van a ir bien. Lo hago porque me apetece y ya está. Y luego, puede funcionar o no. Tampoco me llegan diez guiones al día ni mucho menos. Es un público más adulto, mientras que 'El Internado' tenía uno más adolescente.
Y si 'Hispania' durara varias temporadas, ¿te plantearías abandonarla antes de que terminara como sucedió con 'El Internado'?
No me gusta comprometerme con una serie a largo plazo porque me siento ahogada. Lo supe con 'El Internado', que era lo primero que hice cuando llegué a España. Seguiré mientras me siga llenando.
¿Te están saliendo más proyectos en cine?
Hay alguna cosa, pero entre hablar y hablar pasa el tiempo y al final no se sabe... Por ejemplo, acabo de terminar 'El Callejón' de Antonio Trashorras. Grabando aquí todo el día no se puede hacer otra cosa. Es imposible. Y mucho más rodando en exteriores y dependiendo de lluvias, etc. Y de teatro lo mismo... Tendría que dejar 'El Internado'...
"No creo que esta temporada me toque hacer escenas de sexo".
¿El?
¿'El Internado' he dicho? (Risas). 'Hispania' por Dios... Hay veces que no sé si vale la pena luchar tanto para conseguir algo que al final yo misma voy a estar estresada si no llego a grabar a un sitio... Es mejor hacer una cosa, luego otra, luego otra... Pero siempre pasa que cuando te sale una cosa te salen ocho y luego no puedes hacer nada, así que...
¿Crees que hacer una serie como 'Hispania' te coarta la posibilidad de hacer otras cosas?
Sí, pero no como algo negativo. Es una elección. Yo he querido hacerla y suponía que podía salirme otra cosa mientras tanto. Lo elegí y por suerte pude compaginarla con el rodaje de 'El Callejón'. Sigo trabajando y no estoy en mi casa sin hacer nada.
Al final no os habéis enfrentado a 'Piratas' aunque siempre se barajó como una posibilidad. ¿Cómo vivís los actores las guerrillas entre cadenas y los cambios de horarios? ¿Afecta al resultado final?
No formamos parte de esa decisión pero está claro que si no se tiene tiempo para trabajar no va a quedar nunca igual de bien. Todo se hace con prisas y no estás cómodo. Claro que te afecta. No estamos hablando de imprimir periódicos. Si se acelera el ritmo, muy pocas veces sirve para los actores.
Santiago Gimeno