Emilia Clarke (Londres, 1988) era una completa desconocida hasta este año. ¿Quién había oído hablar de ella? Estudió interpretación en el Drama Centre de Londres -igual que Paul Bettany, Michael Fassbender o Colin Firth- y justo tras graduarse, en 2009, participó en un episodio de la telenovela de BBC One 'Doctors'. Un año después colaboró en el telefilme de dinosaurios 'Triassic Attack' y en 2011 fue bendecida con el papel de Daenerys Targaryen en la serie de HBO 'Juego de tronos'. Un personaje por el que muchas matarían -se lo ofrecieron primero a Tamzin Merchant ('Los Tudor'), que lo rechazó- y piedra angular de la monumental saga literaria 'Canción de Hielo y Fuego' de George R.R. Martin.
En la hasta ahora única primera temporada, emitida en España por Canal +, la hemos visto evolucionar de una heredera desposeída de títulos y riqueza a una líder nata y sanguinaria, una Khaleesi. De un complaciente y virginal títere de su trastornado hermano Viserys (Harry Lloyd) a una sensual esposa de inocencia casi lasciva. Y como Daenerys, Clarke es extremadamente tímida en el trato, prudente y a veces infantil, aunque también sorprendentemente madura en algunas de sus respuestas. Durante la entrevista, mantenida durante el pasado Festival de Televisión de Montecarlo, la niña nacida en medio de una fortísima tormenta nos habla -con un marcadísimo acento británico- de lo importante que es para ella mantener el anonimato, de sexo explícito -y hasta de pornografía- y de cuánto echará de menos a su "Tigger" Jason Momoa. Suerte que no es ni la mitad de dura que en la serie: "Me pongo nerviosísima cuando monto a caballo. O actúo o monto. Las dos cosas, imposible".
La segunda temporada se estrenará en primavera de 2012 con fichajes como los de Natalie Dormer ('Los Tudor'), Gwendoline Christie ('El imaginario del Doctor Parnassus'), Stephen Dillane ('John Adams'), Carice Van Houten ('El libro negro') y Liam Cunningham ('Camelot'). La serie fue uno de los platos fuertes de ayer, jueves, durante el Festival Comic-Con de San Diego 2011.
¡¡Tiene pelo!! Siempre pensamos que se lo tiñeron para la serie. ¿Lleva peluca?
Sí, la llevo. Y es alucinante. Me recogen el pelo y se adapta perfectamente. No me gustaba quitármela porque me veía muy guapa con ella en lugar de con mi pelo castaño natural (Risas).
¿Era fan del género fantástico antes de participar en 'Juego de tronos'?
Sí, lo era. Cuando era muy pequeña me leí 'El Señor de los Anillos' y siempre me han gustado los mundos fantásticos como lugares que visitar o sitios en los que ocultarte y escapar de la realidad. Los libros de 'Canción de Hielo y Fuego' también me los he leído, claro, aunque eso no fue hasta un poco antes hacer las pruebas para el papel de Daenerys. Tomé muchas notas y me sirvió mucho para preparar el papel.
Una de las imágenes promocionales de la primera entrega de 'Juego de tronos'.
¿Le para la gente por la calle ahora que ha protagonizado la serie del momento?
Nooooooooooooooo (Risas). ¡¡Nadie me conoce!! Y me encanta que no lo hagan. Una vez estaba en una librería y pensé que un chico me había reconocido. Vi esos ojos en su cara de: "Tú me suenas de algo". No le di tiempo porque me puse a correr como una loca fuera de la librería... (Risas).
¿Seguirá siendo la segunda temporada tan fiel a la obra original como hasta ahora?
Eso espero. He leído todos los libros y es lo que me gustaría, teniendo en cuenta todo lo que le pasa a mi personaje. También yo tengo parte de responsabilidad para ajustar mi interpretación lo máximo a la imagen que pinta George R.R. Martin de Daenerys, y por eso leo los libros una y otra vez, una y otra vez. Pero siendo sinceros, opino que 'Juego de tronos' es bastante fiel, por no decir muy fiel, al manuscrito. Y por eso los fans, al menos de momento, han quedado muy contentos con el resultado. Mi personaje favorito es el de Arya Stark, el personaje de Maisie Williams. ¡¡Es igual que en la novela!! ¡¡Muy machorro!!
Daenerys (Clarke) junto a su leal consejero Jorah Mormont (Iain Glenn).
¿Cómo explica el auge de personajes femeninos fuertes?
No sé... Bueno, las mujeres somos guerreras, ¿no? Es fantástico. En la época de Shakespeare no había papeles femeninos porque no dejaban actuar a las mujeres y ahora míranos.
¿Nos puede contar alguna anécdota de cómo es trabajar para HBO? ¿No admiraba a actores de alguna de sus series antes y ahora gracias a 'Juego de tronos' los ha podido conocer?
Una vez me senté cerca de James Gandolfini [Tony Soprano en 'Los Soprano'] y me quedé congelada. Sólo intentaba reunir el valor suficiente para decirle que su trabajo era brillante (Risas). Y cuando me levanté para acercarme a él, ya se había marchado (Risas). Son cosas que pasan. ¡¡Tenía mariposas en el estómago!! Fue una pena perder una oportunidad como esas (Risas).
Jason Momoa, el futuro Conan el bárbaro, desafiante en su papel de Khal Drogo.
Le han preguntado mucho sobre sus escenas de desnudo, así que cambiemos la pregunta. ¿Cree que lo explícito es más rico para la audiencia que las elipsis en títulos como 'The Good Wife' o 'Mad Men'?
Es muy valiente que determinadas series muestren el lado más descarnado del sexo, y sé que a una parte de la audiencia le desagrada. Pero si estás haciendo una basándote en un libro y el sexo es una parte fundamental para entender al personaje... ¿No es una herramienta que puede usar el espectador para empatizar con el personaje antes que un suplicio? Yo puedo hablar de mi personaje y al menos en mi caso lo es. Las escenas de sexo son importantes para entender su crecimiento.
Como espectadora, ¿prefiere el sexo cuando es sugerido o mejor en estado salvaje y crudo?
Depende de la historia y de muchas cosas. A veces estás viendo algo y dices: "Ohhhhhhhhhh, eso era totalmente innecesario" (Risas). Y en ocasiones es muy útil. Entiendes por qué lo han puesto en el guión. Si se hace con estilo y viene a cuento, estoy a favor de las escenas de sexo. Y si lo que ves no reúne ninguna de esas condiciones, estás viendo porno (Risas). ¡¡Cambia el canal, hombre!!
El déspota de Viserys Targaryen (Harry Lloyd) con su codiciada corona de oro.
¿No le ha resultado duro el rodaje con tanto salvaje, la peluca y el aprender a hablar Dothraki?
Había escenas que te dejaban exhausta. Todo fue muy intenso, a veces trágico, pero también teníamos tiempo para hacer el tonto gracias a Jason [Momoa]. Intimida un poco porque parece una montaña más que un hombre, pero es muy profesional y todo un bromista. Yo soy un retaco a su lado. Le apodamos "Tigger" [como el personaje de 'Winnie Pooh'] porque siempre es muy animado y vivaz.
¿Diría que Daenerys sufrió de Síndrome de Estocolmo con Khal Drogo o le quiso de verdad?
No lo había pensado nunca... Veo la relación entre Daenerys y Drogo mucho más romántica que sexual. Juntos representan la combinación de dos culturas muy distintas y entre ellos se muestran como jamás lo habían hecho con otros. Puede que al principio parezca que estoy secuestrada y también es cierto que utilizo el sexo como medio de supervivencia, como salvadidas, pero al final se aman de verdad.
La Khaleesi en una escena del último (y magnífico) episodio de 'Juego de tronos'.
¿Se le ha hecho raro despedirse de Momoa, Mark Addy y Sean Bean?
Síiiiiiiiiiii... Es muy raro, porque conectamos desde el principio y hemos pasado mucho tiempo juntos. Y ahora, de repente, se marchan. A la gente que ve 'Juego de tronos' supongo que le habrá pasado lo mismo. Pero hay que asumir que es parte de la historia. Voy a echar muchísimo de menos a Jason y a Harry [Lloyd]... Mis amigos [pone cara como si se fuera a poner a llorar y voz melosa e infantil]. ¡¡Mi Tigger!!
Santiago Gimeno