Familia, la nueva apuesta de comedia de Telecinco, arranca esta noche en la pequeña pantalla. La cadena de Mediaset emitirá el primer episodio del que espera que sea su próximo éxito hoy martes 8 de enero a las 22.30 horas, compitiendo así con Fenómenos, la nueva comedia de Antena 3. Dirigida por José Ramos Paíno (El comisario, Los Protegidos) y con guiones de Alberto Macías (Cuéntame cómo pasó), la ficción realiza un nuevo intento por llenar el hueco dejado por sus series familiares de mayor éxito, Los Serrano y Médico de Familia, en la parrilla de la cadena.
Familia abordará los pequeños dramas, miedos y alegrías de los Oquendo, una familia poco tradicional que gira en torno a tres hermanas, Malena (Juana Acosta, Hispania, Crematorio), Carlota (Alexandra Jiménez) y Natalia (Nausicaa Bonnin, Las vidas de Celia). Completando el reparto también encontraremos a otros actores como Santiago Ramos (Aquí no hay quien viva), que será el padre de las hermanas, Diego Martín (Niños robados) o Miguel de Miguel (La reina del sur).
Con el motivo del estreno de la serie, SensaCine ha hablado con Alexandra Jiménez, conocida por su papel de África en Los Serrano y por el de la psicóloga protagonista de La Pecera de Eva, para que nos cuente qué nos encontraremos en Familia y las motivaciones de su personaje.
¿Cómo definirías la serie?
Pues la definiría como una comedia que cuenta situaciones absolutamente reales y reconocibles con muchísimo sentido del humor, y con los personajes contándotelo con toda la verdad que pueden.
Es una comedia familiar, ¿pero es muy distinta a Los Serrano?
Sí, totalmente. Es otro tono, otras situaciones, otros personajes… Es otra serie, es otra historia. Es una comedia en la que sonríes. Hay momentos del capítulo en los que yo me río, y otros en los que te da un pellizco en el estómago y dices "Guau".
¿Crees que la serie puede estar muy dirigida o enfocada a un público femenino?
Creo que es tanto para hombres como para mujeres. Pero es de las pocas en las que hay tres personajes femeninos, sin contar a la madre, que están muy presentes todo el tiempo, y creo que sí hay un punto de vista femenino a lo largo de toda la serie. Pero existe por supuesto el punto de vista masculino. Está mi padre, está mi hijo, están los maridos de mis hermanas, está Pedro. Lo que pasa es que estamos acostumbrados a que no esté tan compensado esto. Me encanta que esté contado así, porque ya era hora.
Las hermanas Oquendo, Malena (Juana Acosta), Carlota (Alexandra Jiménez) y Natalia (Nausicaa Bonnin), personajes principales de Familia.
¿Cómo es tu personaje?
Interpreto a Carlota, que es la hermana mediana, y digamos que es la que siempre ha ejercido el rol de responsable y de persona sensata que siempre hace lo que hay que hacer, lo que se debe hacer y no lo que realmente ella ha sentido. Esto juega un poco en contra de ella pero siempre a favor de la familia. Y ese es su gran conflicto. En el momento en el que le toca ocuparse de sí misma, para empezar no sabe ni cómo hacerlo, porque no lo ha hecho nunca. Siempre es de cara a los demás. Es madre soltera, y trabaja como secretaria de un político de la comunidad de Madrid.
¿Y cómo es lidiar con un hijo adolescente?
Pues en el caso de Carlota y de Jacobo, que es su hijo, es bastante sencillo porque él es un niño muy responsable. Se ha criado con ella pero inevitablemente también se ha criado mucho en casa de los abuelos. Él ha crecido en una situación no del todo convencional en ese sentido, y podría haber tomado dos caminos, el ser un cabra loca o ser el niño responsable que ha sido siempre y que siempre está a favor de su madre, de ayudarla, porque ve que siempre está desbordada, que hace cinco cosas a la vez y siempre está desbordada. Y es su hijo quien muchas veces la ayuda en ese sentido, y se ocupa mucho, la protege mucho él a ella. En ese sentido es una relación muy especial y muy bonita. Es muy bonito ver como un chaval de 16 años tiene tanta madurez y entiende la situación poco común que vive su madre.
¿Y cómo se tomaron sus padres que fuera madre siendo tan joven?
Ella lo tuvo con 16 años y se apoyó mucho en sus padres. Eso es algo que siempre va a estar pesándola a ella. Sí, ha tenido mucha ayuda, pero ella es su madre y en muchas ocasiones la desautorizan un poco de cara a Jacobo. Y no es justo, porque ella lo ha criado, pero es cierto que con mucho apoyo de la familia.
¿Es Carlota el ojito derecho de alguno de sus padres?
Tiene una relación especial con su padre, y eso se ve desde el principio. Cosas que él no le cuenta absolutamente nadie, coge a su hija y se lo cuenta la primera. Hay una complicidad que se ve desde el primer momento. Por muchas meteduras de pata que cometa, ella siempre está ahí y vive los vientos por su padre. Es una relación de amor y unión absoluta. Y hay cosas gordas que pasan, y Carlota está ahí con su padre porque lo adora.
¿Cómo es la relación con su cuñado Miguel (Diego Martín)? Porque se rumorea que tuvieron un antiguo romance…
Pues ellos fueron pareja antes de que lo fueran Malena y él. Y bueno, la cosa tiró por otros derroteros y ahora es su cuñado y está casado con su hermana. Entonces tienen una relación muy bonita, son muy amigos, tienen mucha complicidad, pero tienen un pasado que está ahí.
¿Tensión sexual no resulta?
Bueno, son amigos, pero tienen una complicidad bastante evidente. Se quieren, se apoyan. De repente hay cosas que no sabe nadie y que Carlota puede contar a Miguel. Y hay cosas de Miguel que no sabe nadie y a la primera persona que se lo va a contar es a Carlota. Son confidentes.
¿Conoceremos al padre de Jacobo? ¿No será tu cuñado?
De momento no. (Risas)
Alexandra Jiménez (Carlota) y Álex Batllori (Jacobo) son madre e hijo en Familia.
¿Tienes muchas cosas en común con el personaje?
Sí que tenemos bastantes, en el sentido de responsabilizarse de cosas que muchas veces no están en su mano. Creo que eso nos pasa a muchísima gente, por ejemplo decir que no.
¿Te cuesta decir que no?
A mí sí, pero estamos trabajando en ello. (Risas) Me parece que esto es una característica muy común a las mujeres. Muchas veces sentir que te tienes que responsabilizar de absolutamente todo. De todo más de lo que no puedes responsabilizarte. Y me gusta mucho interpretar a una mujer así porque como mujer reconozco muchas situaciones por las que pasa ella. La relación con sus padres es complicada, se preocupa mucho porque su madre esté bien, sus hermanas, su hijo, de pronto tiene un jefe que no se entera de nada y le achaca todo… Está haciendo malabares durante toda la serie.
¿Veremos una Carlota desquiciada, o una mujer que busca el equilibrio?
Ella busca el equilibrio para los demás. En su vida intenta manejarse en ese equilibrio y de repente se da cuenta de que no sabe hacerlo. Y cuando tiene que enfrentarse a conflictos propios es cuando empiezas a ver las grietas de ese personaje y que esa madurez no es tal. Por ejemplo tiene mucho miedo al compromiso, a tener una relación, a que entren en su vida y dejar de ser la que lo controla todo. A medida que la vas conociendo ves que esa característica es una actitud. Pero una persona no puede ser responsable y sensata en todo momento, y cuando la ves en situaciones que no puede controlar es cuando descubres a otra Carlota.
¿Y ahí entra el juego del personaje de Pedro (Miguel de Miguel)?
Sí. Él es el médico de mi padre, y desde que nos vemos por primera vez pues hay mucha química. No todos los médicos son así de guapos. (Risas) Yo me quedo como flasheada desde el primer momento. Él es un hombre maravilloso, y de pronto es como oxígeno para Carlota. Le ofrece todo lo que no le han ofrecido nunca, y de repente ella puede liberarse de muchas cosas y decir “Venga, para delante”. Pero ella no sabe desenvolverse en esa situación.
¿Quiere pero no puede?
Yo creo que quiere pero no sabe. Hay demasiadas cosas que ella ha establecido en su vida que le impiden decidir, de probar y de equivocarse. No se atreve.
El reparto de Familia al completo.
¿Qué otros proyectos tienes? ¿Cine, teatro?
Familia. (Risas) Estoy centrada en esto. Llevo desde La Fierecilla domada sin hacer teatro porque he enganchado con proyectos de tele y de cine, y después de vivir la experiencia de estar en varios sitios a la vez he querido centrarme en una sola cosa y estar al 200% con esa cosa. Porque si no, luego llego fatal a todos los sitios, y… (Risas).
¿Y qué pasó con La Pecera de Eva? ¿Por qué no continuó?
Se hicieron cuatro temporadas, y terminó. Ahí se quedó.
Es una pena, ¿no? Porque la serie era considerada muy original, gustó mucho y tuvo muy buenas críticas.
Sí. Los personajes eran una pasada. Y no era cara para nada. Es más, duró muchísimo más de lo que pensábamos al principio, porque yo creo que estaba pensada para algo más corto. Y de repente hicimos cuatro temporadas de 65 capítulos cada una y estábamos felices de haber llegado allí.
¿Y Cheers? ¿Qué sabor de boca te dejó su cancelación, después del gran esfuerzo y la gran la promoción?
Esfuerzo hay siempre, y detrás del esfuerzo nunca sabes con qué resultado te vas a encontrar. Ahora tampoco lo sabemos. Ojalá sea super positivo, sobre todo por como lo pasamos y porque son personajes muy auténticos, muy de carne y hueso. En el momento que estamos ahora tú ves a esos personajes viviendo esas situaciones y creo que merece la pena ser contado. Pero lo que pasé no está en nuestras manos. Entonces hay que contar con eso desde el principio. Puede funcionar, puede que no… Y Cheers no funcionó.
Álvaro Alonso
