El reparto de The Walking Dead tiene la suerte de formar parte de una de las series de televisión más vistas de la década, aunque también ha de vivir con el temor de que su personaje puede perder la vida en cualquier momento. Que nadie está a salvo en esta terrorífica historia de supervivencia se ha repetido hasta la saciedad desde el lanzamiento de la exitosa ficción zombi, aunque parece que los actores no son los únicos que lo pasan mal al respecto.
Robert Kirkman, autor de los cómics en que se basa la serie y productor ejecutivo de la ficción, ha confesado que si hay algo más difícil que despedir a uno de los miembros del reparto, es el tener una idea bastante clara de cuándo le llegará la hora a cada uno de ellos: "Tengo una idea de cuando va a morir cada uno de ello. Hasta cierto punto, si seguimos el cómic, posiblemente mayor que la que tiene el 'showrunner' Scott Gimple".
Asimismo, el guionista asegura que es más difícil perder a los personajes ahora que son de carne y hueso: "Siempre esto en plan: 'dos años, tres años, seis meses, dos semanas. Oh Dios. Esto es horrible'. Es realmente duro. Hacer el cómic estaba bien porque eran sólo líneas sobre el papel. Lo que sea. Vamos a matar a ese tipo. Bien. Pero en la serie apesta, porque todos trabajamos juntos, salimos por ahí y pasamos buenos ratos", ha declarado en una entrevista con 'Entertainment Weekly Radio'.
Por otro lado, Kirkman ha señalado que también es realmente duro el no poder confesarle al actor el destino de su personaje. ¿El motivo? Porque podrían ver la necesidad de cambiar de opinión en el último momento, algo que, en sus propias palabras, "ha pasado muchas veces".