Josephine Gillan es una actriz británica cuya carrera en el mundo de la interpretación comenzó con Juego de Tronos en 2012, cuando fue seleccionada para encarnar a una cortesana llamada Marei en la segunda temporada. Tras su primera intervención en la serie más exitosa de la televisión, Gillan volvió en las siguientes entregas y, según ha confirmado a Daily Mail, ya tiene asegurada su presencia en la séptima temporada que HBO estrenará en 2017.
En su íntima entrevista con Daily Mail, Gillan ha revelado también que su papel de prostituta en la serie de HBO la permitió, de hecho, dejar su trabajo como prostituta en la vida real: "Juego de tronos me salvó de una vida de prostitución y me ha hecho una persona más fuerte".
La actriz ha relatado que su pasado está marcado por una problemática niñez marcada por el abuso y ha contado cómo llegó al elenco de Juego de Tronos. "Estaba trabajando como prostituta y al mismo tiempo hacía películas X. Entonces vi un anuncio en una web en el que se buscaban actrices para la industria del cine. Buscaban mujeres jóvenes, con pechos naturales, sin tatuajes y a las que no les importase ser grabadas desnudas. Así que inmediatamente mandé una fotografía".
Según Gillan, que ha hablado con detalle de su experiencia en el rodaje de la serie, cuando la llamaron diciendo que había sido seleccionada, fue emocionante saber que podría hacer otro tipo de actuación, pero que nunca llegó a imaginar cuánto cambiaría su vida. Además de Juego de Tronos, la actriz ya ha participado en dos películas independientes.