Es difícil imaginar, a estas alturas, a un Sherlock Holmes y John Watson que no sean Benedict Cumberbatch y Martin Freeman, pero en los inicios de Sherlock, la serie basada en los relatos de Arthur Conan Doyle, su reparto principal pudo ser muy diferente.
Cumberbatch fue el único actor que realizó la audición para dar vida al detective residente en Baker Street. Su interpretación del villano Paul Marshall en Expiación (2007) fue lo que le convirtió en el favorito del equipo de producción para ser el protagonista. Pero encontrar a su compañero, Watson, no fue tan fácil. Una de las opciones era Matt Smith, a quien Steven Moffat, creador de la ficción, fichó después para interpretar al undécimo Señor del Tiempo en Doctor Who.
Smith fue rechazado por ser demasiado "chiflado" y "más Sherlock Holmes que Watson". "Vino e hizo una gran audición, pero no tenía ninguna posibilidad de hacerse con el papel. Claramente era más Sherlock que Watson", contó Moffat en 2010 en la revista de Doctor Who. "Había algo de chiflado en él y no quieres eso para Watson. Quieres algo más normal", añadió.
En cuanto a Moriarty, Andrew Scott es el encargado de dar vida al archienemigo de Holmes, pero Arsher Ali (The Missing) también optó al papel del villano. "Me devolvieron la llamada. Pensé, 'esto es genial. Es genial que piensen que Moriarty podría ser yo. Increíble'", afirmó en 2015 (vía Digital Spy). Sin embargo, no se esperaba que fichasen a Scott. "Él es fantástico", reconoció Ali.
La cuarta temporada de Sherlock se estrena en 2017. Mientras tanto y sobre estas líneas, no te pierdas el tráiler de la nueva entrega.