El reparto de The Walking Dead es uno de los que está más unido de toda la televisión y prueba de ello son las anécdotas que comparten con sus seguidores, aunque no lo estén pasando nada bien durante el rodaje. Según informa Entertainment Weekly, hacía tanto calor en Georgia en junio que Jeffrey Dean Morgan tenía que recurrir al Gatorade para no acabar deshidratado en esa ya mítica chaqueta de cuero. Sin embargo, no es lo peor que le pasó en la grabación.
Según cuenta Andrew Lincoln entre risas, el actor que interpreta a Negan sufrió una lesión muscular en las costillas que le provocó un enorme dolor: "Estaba sonriendo y cargando tanto que se lesionó un músculo de las costillas. Se doblaba del dolor. Yo le decía '¡Toma esa, hijo de p***!' Y ni siquiera fue durante una toma. ¡Era un ensayo!".
Lincoln asegura que todos los compañeros se rieron de la situación, pero Norman Reedus aclara que él disfrutaba especialmente: "Andy estaba muy emocionado de que se hubiese lesionado las costillas y muy emocionado de que Jeffrey se hubiese herido a sí mismo. Realmente estaba metido en ello".
¿Qué es lo que le pasó realmente a Morgan? El propio actor lo cuenta así en Entertainment Weekly: "Tuve horribles calambres en mitad de una escena. [...] Así que tuve una contracción e intentaba gritar, pero hizo que me doblase. Estaba gritándole y riéndome al mismo tiempo. Así que me seguí riendo y él pensó que era divertidísimo".