Tras Show me a Hero y The Night Of, HBO ha apostado por Big Little Lies para que siga la estela de éxito de sus miniseries con un muy acertado reparto que seguramente tenga alguna que otra nominación a las próximas galas de premios Emmy y Globos de Oro, respectivamente, y que se podrá ver en nuestro país el próximo 20 de febrero de la mano de HBO España.
Al poder haber visto los seis de los siete episodios de la serie, se puede ver perfectamente que Jean-Marc Vallée, director de Dallas Buyers Club y Wild (con Reese Witherspoon), ha dirigido Big Little Lies concibiéndola principalmente como si de una película se tratase, pero dividida en siete partes.
Sin prisa ninguna, el primer capítulo nos presenta las que serían las principales protagonistas: Madeline Mackenzie (Reese Witherspoon), Celeste Wright (Nicole Kidman) y Jane Chapman (Shailene Woodley). El principal factor de misterio, al igual que en el libro homónimo de Liane Moriarty, se trata del asesinato de una persona, cuya identidad junto a la del asesino o asesina desconocemos. Sin embargo, lo que puede llegar a interesar más son las ‘grandes mentiras’ que se nos presentan de las protagonistas al comienzo del episodio y que se nos revelan al final del mismo. Como dice un personaje de la serie: “Nadie sabe nada de nadie”.
Así nos adentramos en conocer a cada una de las protagonistas y su relación entre ellas y los de la ciudad, personajes que van apareciendo perfectamente hilados a modo de declaraciones con la policía. Los personajes masculinos involucrados con las protagonistas en la serie son apropiadamente mero apoyo argumental para ellas.
Sin lugar a dudas, Reese Witherspoon es la que más brilla entre este magnífico reparto de Big Little Lies, sobre todo cuando interactúa con el personaje de Laura Dern. También hay que hacer una especial mención al uso importante de la banda sonora en la serie, donde destaca más en el opening con una exquisita edición perfectamente reflejada en cada uno de los episodios.
Lo mejor: El reparto femenino de la serie
Lo peor: Un guion que puede llegar a desinflar la serie en algunos momentos.