Prison Break vuelve a estar en boca de todos. El estreno de la quinta temporada ha avivado el fenómeno fan que rodea la serie y ahora echamos la vista atrás para recordar lo que más nos impactó cuando se emitió el primer capítulo allá por 2006: los tatuajes. Michael Scofield decoró su piel con los planos necesarios para sacar a su hermano de la cárcel, pero en la vida real era un trabajo diario que requería mucho esfuerzo.
Wentworth Miller tenía que permanecer cuatro horas y media en la sala de maquillaje hasta que los trabajadores terminaban de colocar todos los detalles. En el vídeo que hay sobre estas líneas, el actor explica que cada día se lo quitaba porque era demasiado "pegajoso". En ese mismo vídeo cuenta que tenían que ponerle entre 20 y 25 calcamonías en la piel y encajarlas como si fuesen un puzzle.
Quitárselo tampoco es algo rápido. Tardaba dos horas en eliminar todos los tatuajes falsos. Tenía que pasar por ese proceso solo cuando tenían que grabar escenas en las que aparecía sin camiseta, por eso a Miller le encantaba que su personaje llevase manga larga.
'Prison Break': Así han cambiado los protagonistas desde la primera temporada
