Parece que Andrew Lincoln está completamente a favor de que su personaje experimente uno de los mayores traumas que su contraparte sufre en el cómic. Según recoge Screenrant, en el panel dedicado a The Walking Dead en la Comic-Con de Nueva York celebrada el pasado fin de semana, el actor que interpreta a Rick Grimes admitió haber hecho campaña para que su personaje pierda su mano.
En los cómics de Robert Kirkman en que se inspira la serie de AMC, el Gobernador corta la mano derecha de Rick cuando éste se niega a desvelar que habitan en la prisión, una zona segura muy "apetecible" para los supervivientes al apocalipsis. La pérdida fue un trauma para el protagonista, que tuvo que aprender a vivir sin ella y en un momento llegó a colocarse una especie de prótesis con dos ganchos.
Sin embargo, el inolvidable momento entre los lectores del cómic nunca llegó a producirse en la serie de AMC y, de hecho, el equipo de la serie ha explicado en ocasiones anteriores que ha sido una decisión meditada. Sobre ello bromeó Lincoln en el evento, quien recordó que no se había introducido el fatídico momento por el gran coste que supondría al departamento de efectos especiales.
Sin embargo, Robert Kirkman ya había descartado que el presupuesto o la necesidad de efectos fueses el motivo con anterioridad, comparando el asunto con la pierna de Hershel y asegurando que si realmente hubiesen querido cortar la mano de Rick, lo habrían hecho. Eso sí, Kirkman admite que un Rick manco hubiese sido difícil de manejar en la serie, complicando mucho las escenas de acción.