Nuevo episodio en el escándalo alrededor de Kevin Spacey. Este jueves, la cadena CNN ha hecho públicas las denuncias anónimas de ocho trabajadores de la serie House of Cards, que el actor protagonizaba hasta su cancelación.
En las declaraciones, los miembros del equipo acusan a Spacey, que también titula como productor ejecutivo de la ficción, de "crear un ambiente de trabajo tóxico" mediante acciones como "acoso sexual" y "comportamiento predador".
"Nos inquieta enormemente conocer estos nuevos alegatos con respecto a Kevin Spacey y a su relación con los miembros del equipo", ha comentado un responsable de MRC, productora detrás de House of Cards, según recoge EW. "Crear y mantener un espacio de trabajo seguro para nuestros actores y equipo siempre ha sido nuestra prioridad principal", asegura.
Además, MRC recuerda una acusación datada en 2012 en la que un miembro del equipo acusó de comportamientos similares a Spacey. "Se tomaron acciones inmediatas", explican, "y sabemos a ciencia cierta que el incidente se resolvió con todos los afectados satisfechos".
Cada vez menos apoyos
Netflix, que hace unos días canceló la serie tal y como la conocemos y anunció un spin-off basado en la misma, también se ha pronunciado a raíz de las recientes acusaciones. "Solo éramos conscientes de un incidente, ocurrido hace cinco años, que hasta donde sabemos se solucionó rápido", cuentan. "El martes suspendimos la producción en acuerdo con MRC; sin embargo, Netflix no está enterado de otros incidentes relacionados con Kevin Spacey en el set".
Mientras brotan nuevas voces en denuncia a los supuestos comportamientos del actor, son muchos los que le retiran su apoyo. Ha sido el caso de su publicista, Staci Wolfe, el último en anunciar que renuncia a trabajar para Spacey; algo similar ha hecho CAA, la agencia de cabecera del intérprete.
A pesar de la oleada de abandonos, Spacey todavía cuenta con algunos representantes. Uno de ellos ha sido el encargado de anunciar que el actor "se está tomando el tiempo necesario para buscar una evaluación y un tratamiento", aunque no ha especificado los aspectos en los que se centrará ese posible análisis. Solo una cosa es clara: la pila de acusaciones a las que se ha enfrentado Spacey no ha parado de crecer desde que el pasado lunes Anthony Rapp, de 46 años, denunciase acoso sexual por parte del actor cuando el afectado tenía tan solo 14 años.