House of Cards, una de las series insignia de Netflix, se vio envuelta en cierta polémica en 2017 cuando se hicieron públicas una serie de acusaciones de acoso sexual contra su actor protagonista Kevin Spacey. Ante este panorama, la ficción decidió cortar todo tipo de relación con el intérprete y productor y despedirle. Ahora, ha salido a la luz el dinero que le ha costado a la plataforma en 'streaming' desentenderse del actor.
Según informa Deadline, a Netflix le ha costado 39 millones de dólares (31 millones de euros) cancelar el contrato de Spacey y de otros proyectos con los que han decidido no seguir adelante como el 'biopic' de Gore Vidal. Pese a estas cifras, la plataforma en 'streaming' ha conseguido ganancias con el estreno de la segunda temporada de The Crown y con Bright, cinta protagonizada por Will Smith y dirigida por David Ayer que se ha convertido en un gran éxito para la compañía. Por ello, no es de extrañar que ya hayan dado luz verde a su secuela.
Volviendo a House of Cards, la salida de Spacey provocó varios contratiempos en la ficción. Después de suspender la producción de su sexta temporada y anunciar que sería la última y que no contaría con el intérprete, el destino de la serie era incierto. No obstante, en diciembre de 2017 se confirmó que la ficción sigue adelante y que su rodaje se retomará este año para llevar a cabo una entrega más corta. Además, Netflix ya está trabajando en un 'spin-off' de la serie que podría estar centrado en en Doug Stamper, el jefe de personal del presidente Frank Underwood interpretado por Michael Kelly.
