La octava temporada de The Walking Dead lleva por definición el nombre de montaña rusa. La ficción zombi registra malos datos como obtiene una buena puntuación con su último episodio 'The Key', algo esperanzador para los espectadores. Puede que el sello de la serie de AMC siga oculto en algún lugar y aparezca en cualquier momento. El actor Norman Reedus, de hecho, ya ha prometido que el final compensará todos esos errores.
El encargado de dar vida a Daryl Dixon ha hablado en una entrevista reciente de EW sobre lo que acontece en la ficción y lo disperso que está siendo cada argumento de la historia, por ello adelanta que "todos se reunirán en el episodio 16" titulado 'Ira'.
Hay cuatro cosas que pasan que podrían ser el final, y todas se disparan al mismo tiempo. Van en diferentes direcciones, y todos son tan buenos individualmente como los demás, y todos son muy, muy satisfactorios. Eso es lo que me gusta. Me gusta que no sea sólo la historia de una persona. Hay probablemente cuatro, tal vez cinco, direcciones diferentes en las que el espectáculo podría haber terminado y fue en todas ellas. Es muy satisfactorio
Es así como Reedus se hace eco también de las palabras de Scott M. Gimple, el final de la octava temporada será algo "enorme". Pero para ello habrá que esperar al 15 de abril, mientras tanto The Walking Dead sigue con su emisión habitual en la cadena AMC con la mirada puesta en la ya confirmada novena temporada, donde Gimple será sustituido por Angela Kang. Mira sobre estas líneas el adelanto del episodio del próximo domingo 'Do Not Send Us Astray'.