American Crime Story está demostrando ser una de las ficciones más exitosas de los últimos años. Tras crear Glee o American Horror Story, Ryan Murphy decidió repetir con una serie antológica, pero en lugar de volver a hablar sobre los miedos optó por basarse en hechos reales. La primera temporada seguía el juicio a O.J. Simpson por los asesinatos de su mujer, Nicole Brown, y un amigo de ella, Ronald Goldman; la segunda el asesinato a Gianni Versace, y la tercera narrará la historia del huracán Katrina y la cuarta -o una futura temporada- iba a centrarse en la relación entre Bill Clinton y Monica Lewinsky.
Según recoge The Hollywood Reporter, Murphy ha dejado claro que ya no está interesado en narrar la historia del ex-presidente de los Estados Unidos y una becaria de la Casa Blanca a menos que ella se sume como productora y quiera contar su historia. El equipo de American Crime Story comenzó a tener dudas sobre esta tercera entrega, y el 'showrunner' se encargó de hablar con Lewinsky:
Le dije: 'Nadie debería contar tu historia excepto tu, y es un poco grosero si lo hacen. Si quieres producirla conmigo, me encantaría hacerlo; pero deberías ser la productora y deberías hacer todo ese dinero'
Murphy ha explicado que, una vez mantuvo esta conversación con Lewinsky, la joven se mostró aliviada, y dejando claro que no quiere revivir lo sucedido hace más de dos décadas. Cabe señalar que esta entrega iba a estar basada en la novela de Jeffrey Toobin llamada A Vast Conspirancy: The Real Sex Scandar that Nearly Brought Down a Presidente y se publicó en el 2000, pero ahora Murphy y su equipo están buscando una nueva temática, pero antes de eso deben terminar la producción de la esperada tercera aventura, Katrina, mientras la historia de Versace sigue cosechando grandes éxitos.