Llegó el final de Once Upon a Time y con él, el cierre de un cuento de hadas que terminó de la mejor manera. La serie acabó como venían anunciado ya sus creadores, Adam Horowitz y Edward Kitsis, llena de emociones y sentimientos. Pero antes de eso, se vivieron momentos de tensión y tristeza para los espectadores. Colin O'Donoghue ha hablado del momento en el que está al borde de la muerte y sucede el giro inesperado.
El Hook del Reino de los deseos se iba debilitando cada vez más por la cercanía de su hija Alice. Su corazón envenenado no aguantaría mucho más, pero acabar con Rumple de los deseos y su maléfico plan, aislar a todos los personajes de sus historias, era lo más importante. Así pues, Hook agarró fuerta la mano de su hija para no perderla, provocando así su muerte. Pero entonces, tras un discurso digno de final de Mr.Gold/Weaver (Robert Carlyle), que antes le había confesado que había sido su mejor amigo, este arranca su corazón para darle una oportunidad a Hook y su hija.
Cuando me enteré de que Rumple le iba a dar su corazón a Hook para salvarlo, o esencialmente permitir que él y Alice estuvieran juntos, recuerdo que pensé que era una manera tan increíble para esta relación que Bobby y yo hemos invertido en más de seis temporadas, que ha sido tan integral para nuestros dos personajes, hasta el final
El actor ha definido el momento como algo "desgarrador", porque gracias a su sacrificio él puede seguir viviendo. Rumple le dio un final feliz a Hook, algo que parecía improbable después de su relación durante las seis últimas temporadas se basara en la venganza. Pero la temporada siete les unió y se convirtió en "todo lo parecido a tener un amigo". Rumple consiguió así la luz y dejó atrás la oscuridad para siempre.
Me pareció un momento muy bonito y muy, muy importante para mí, como actor, para ellos por conseguir este momento y para que ese fuera el final feliz para Hook