La segunda temporada de Ozark viene en camino y su protagonista y productor ejecutivo Jason Bateman ha comenzado a revelar importantes detalles de lo que acontecerá en la nueva entrega. La serie de Netflix que sigue a la familia Byrde deberán enfrentarse a nuevas situaciones en las que el trato con Jacob Snell será el comienzo de todo:
Fueron ocho millones de dólares la pasada temporada en los que se tuvieron que trabajar. Ahora Marty tiene 50 millones que tiene que limpiar. Estamos fuera de temporada, por lo que no contamos con el lago y su potencial de ingresos, así que se tiene que diversificar.
No solo el blanqueamiento de dinero será el problema mayor de Marty, pues ya en la primera temporada el FBI les pisaba los talones, además, de la relación complicada y peligrosa con el cartel de drogas mexicano. El productor ejecutivo Chris Mundy ya anunció que esta nueva temporada también relatará los diversos problemas y conflictos familiares. Y siguiendo el hilo familiar, por su parte, Ruth (Julia Garner) tendrá que vivir la salida de prisión de su padre Cade, algo que más que solucionar problemas, los creará.
Lo que complica un poco las cosas es que su padre ha vuelto. Así que hay una dinámica paternal aquí que se complica cuando sale de la cárcel y yo no le gusto a él tanto como a ella. La pregunta es: ¿crecerá? ¿Dónde va a estar su lealtad?
Pero el dato más revelador que ha dado Bateman es que en esta nueva entrega habrá que enfrentarse a la muerte de un personaje principal. ¿Quién podría ser? Parece que fue una decisión difícil y dura para el elenco, según ha contado el actor. Para saberlo habrá que esperar a que desde Netflix se anuncie la fecha de estreno de esta segunda temporada, que será en algún momento de este año 2018.
