Tras dar respuesta a "¿Quién pintó los penes?" en la primera entrega, la segunda temporada de American Vandal ha brindado un nuevo caso a los documentalistas Peter Maldonado (Tyler Alvarez) y Sam Ecklund (Griffin Gluck) que podría describirse en una única palabra: escatológico.
Alertados por una de las alumnas de la Escuela Católica St. Bernadine, Maldonado y Ecklud deciden que los atentados de una persona que se hace llamar el "Zurullo Vengador" son la investigación perfecta para desarrollar la segunda entrega de su serie documental. Una vez allí, los investigadores descubren que el culpable ha cometido tres atentados relacionados con caca -siendo el primero (y el más grave) de ellos la contaminación de la la limonada de la cafetería con un fuerte laxante- y que no tiene intención de parar. El "Zurullo Vengador" sigue amenazando con nuevos atentados a través de su cuenta de Instagram y estudiantes y profesores viven atormentados ante la posibilidad de ser víctimas del próximo de ellos.
A lo largo de los ocho episodios de la segunda temporada Peter y Sam tratan de llegar hasta el verdadero culpable, mientras que la Dirección de la Escuela y las autoridades se conforman con señalar a un responsable y que los focos dejen de estar sobre ellos. Al igual que en la primera entrega Peter y Sam trataron de exculpar a Dylan Maxwell, en la segunda temporada hacen lo mismo con Kevin McClain (Travis Tope), quien dice haberse visto obligado a confesar los atentados que no ha cometido. Por el camino, multitud de estudiantes y profesores se convierten en potenciales sospechosos y en la investigación van surgiendo nuevos e inesperados giros que lo cambian todo.
Netflix
¿Quién es el Zurullo Vengador?
Tras muchas vueltas en torno a los potenciales culpables, Sam y Peter acaban dando con el "Zurullo Vengador": Grayson Wentz (Jeremy Culhane), un alumno expulsado y resentido con el Instituto y con sus compañeros tras haber sido expulsado por una serie de tuits de mal gusto.
El ex alumno es capaz de poner en marcha un trabajado plan, haciéndose pasar por una joven a la que previamente había hackeado el móvil y desde cuya identidad tanteaba a decenas de profesores y alumnos para conseguir fotos, vídeos o confesiones secretas con los que luego poder extorsionarlos. Por ello, cada uno de los cuatro atentados cometidos tuvo un autor material diferente, que accedió a la petición de su extorsionador por miedo a las consecuencias. Excepto uno de ellos: el propio Kevin McClain, que cometió el atentado conocido como "la evacuación" voluntariamente, siendo este el principal plot twist de la temporada.
La segunda temporada de American Vandal ya está disponible en Netflix.
