El 'teaser' de la octava temporada de Juego de Tronos con el que HBO ha anunciado la esperada fecha de estreno de la recta final de la serie alberga algunos detalles que harán las delicias de sus más fieles seguidores. Uno de ellos tiene que ver con la pluma que, de alguna manera, protagoniza el avance que encabeza estas líneas, ya que no es la primera vez que los espectadores la ven.
Como habrás visto en el 'teaser', Jon Nieve (Kit Harington) pasa por delante de su madre Lyanna Stark y una pluma cae al suelo. Justo en ese momento, Jon siente algo y mira hacia atrás, para después seguir su camino por las criptas de Invernalia. Volvemos a ver la pluma al final del 'teaser', cuando el hielo que zimboliza la llegada de los Caminantes Blancos comienza a extenderse, pero ¿recordabas haber visto el momento en que la pluma es colocada en la estatua de Lyanna?
En el primer episodio de la serie, cuando el entonces Rey Robert Baratheon (Mark Addy) y compañía visitaban Invernalia para pedirle a Ned Stark que fuese su Mano, este bajaba a las criptas de Invernalia para visitar a la que fuese su prometida.
¿Teníais que enterrarla en un lugar como este?", se pregunta Robert tras colocar una pluma en la estatua de Lyanna. "Debería estar en una colina de algún lugar con el sol y las nubes sobre ella
En aquel momento, Robert Baratheon y Ned Stark (Sean Bean) recuerdan que Lyanna fue secuestrada por Rhaegar y que su muerte fue por culpa de los Targaryen, una creencia que finalmente fue desmentida al confirmarse en la séptima temporada la teoría de que la hermana de Ned y el hermano mayor de Daenerys estaban enamorados.
Asimismo, la pluma también pudo verse en la quinta temporada, cuando Sansa (Sophie Turner) regresa a Invernalia para casarse con Ramsay Bolton (Iwan Rheon). En aquel momento, Sansa encuentra la pluma en el suelo, la recoge y la sostiene mientras Meñique le cuenta la historia de Lyanna.
El avance de la octava temporada de Juego de Tronos no alberga escenas de la recta final en cuestión, pero sí está cargado de simbolismo. ¡Contamos los días como locos!