La tercera temporada de Westworld ha llegado a su fin y después de una segunda entrega criticada por muchos de sus fans, la serie ha podido reinventarse en una entrega donde hemos podido ver a una Dolores (Evan Rachel Wood) en todo su esplendor y con un final que adelanta un alentador futuro en su renovada cuarta temporada.
Después de dos temporadas en las instalaciones de Delos, hemos podido ver por fin el exterior donde la tecnología ha evolucionado considerablemente y donde conocemos a Caleb (Aaron Paul), personaje del que descubrimos más tarde una breve pero esperanzadora conexión en el pasado con Dolores y el encargado de al parecer ser el líder de lo que le depara ahora al mundo después de destruir a Rehoboam, un sistema que imponía al ser humano tener unas decisiones en su vida mediante la manipulación y la predicción del futuro.
Pero al destruir este sistema, hemos tenido que despedirnos para siempre de la Dolores que conocemos. Aunque hay algún que otro clon suyo por ahí, la Dolores que conocimos en estas tres entregas ya no volverá a aparecer tras que se haya sacrificado por la humanidad al ver que ésta también sufría de no tener libre albedrío.
Además de haber resuelto alguna que otra incógnita que se planteaban al principio de esta entrega y otras que quedaron sin responder en la segunda entrega, ha habido también mucha acción y exteriores, siendo otra protagonista más la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. Maeve (Thandie Newton) y Dolores han sido las verdaderas protagonistas de esta entrega, algo que se agredece, estando así en un segundo plano todo lo que les ocurría a Bernard (Jeffrey Wright) y Ashley (Luke Hemsworth).
'Westworld': Los creadores confirman la muerte de este querido personaje en el final de la temporada 3Ahora solo queda esperar cómo será la cuarta temporada de Westworld. ¿Habrá un salto en el tiempo tras ver a ese Bernard cubierto de polvo? ¿Ha habido una guerra entre los humanos y los anfitriones? ¿Volverá Evan Rachel Wood al menos en alguna forma? Lo que ha quedado claro, es que la serie de Lisa Joy y Jonathan Nolan ha vuelto a sus raíces de crear incógnitas y dejar al espectador atónito y con más ganas de ver lo que puede llegar a ocurrir más adelante. Definitivamente, una temporada digna de HBO.