La nueva serie protagonizada por Nicole Kidman se llama The Undoing y debuta este domingo en HBO España. Dos son las principales claves que hacen de la nueva apuesta de la prestigiosa cadena uno de los estrenos más esperados de 2020: Que llega de la mano del creador de la aclamadísima Big Little Lies, David E. Kelley, y que bajo su batuta vuelve a ponerse Nicole Kidman, la encargada de interpretar a Celeste Wright en la también serie de HBO. Junto a ellos, Hugh Grant, Edgar Ramirez y Donald Sutherland, entre otros, completan un reparto diseñado para brillar con luz propia. Además, tras las cámaras encontramos a la brillante Susanne Bier, quien vuelve a atreverse con una serie tras su experiencia en El Infiltrado.
Con The Undoing, Kidman vuelve, además, a ejercer el papel de productora ejecutiva en una serie de HBO, como ya hiciera en Big Little Lies, pero es su 'performance' como una mujer de éxito a punto de ver cómo su vida se pone patas arriba la que está en el objetivo de todos los focos. Sus últimos trabajos no dejan lugar a dudas de que la actriz está en un dulce momento a nivel profesional, pero a lo largo de su carrera también nos ha dejado numerosos papeles para el recuerdo.
A continuación, elegimos nuestros favoritos. Es nuestra carta de amor a Nicole Kidman.
'The Undoing' (2020)
Si merece o no merece colarse entre los mejores papeles de la actriz australiana está por ver pero, a modo de apertura de este recorrido por los trabajosde Kidman, hagamos un breve resumen de lo que podemos esperar de The Undoing.
Basada en la novela de Jean Hanff Korelitz, You Should Have Known, la serie sigue los pasos de un matrimonio, Grace (Kidman) y Jonathan Fraser (Hugh Grant), que vive una vida de auténtico ensueño. Ella es una terapeuta de éxito que está de publicar su primer libro y, en su vida personal, todo parece marchar bien. Su marido parece el hombre perfecto y su hijo acude a una escuela de lo más elitista que parece augurarle un futuro prometedor. Sin embargo, todo cambia de la noche a la mañana cuando una muerte violenta se cruza en su vida desvelando terribles secretos de alguien que creía conocer. A partir de ese momento, una traumatizada Grace deja atrás su acomodada vida y empieza desde cero junto a su hijo (Noah Jupe).
'Big Little Lies' (2017-2019)
Big Little Lies ha conseguido tener a una gran e impecable Nicole Kidman en el papel de Celeste Wright. Aunque es difícil poder destacar en este gran reparto formado por Reese Witherspoon, Shailene Woodley, Laura Dern o Zoë Kravitz, Kidman nos regala una de sus mejores interpretaciones de su carrera en esta serie 'thriller' que comienza con un asesinato, concretamente el de su marido, interpretado por Alexander Skarsgard. A partir de ahí, el espectador se pregunta quién es el asesino entre todas estas madres con idílicas vidas en casas de lujo. Tal fue su éxito tanto en crítica como en espectadores, que HBO decidió realizar una segunda temporada a pesar de que consistía solo en una miniserie y que contó además con Meryl Streep como la madre del personaje de Skarsgard.
Big Little Lies está basada en la novela homónima de Liane Moriarty, mismos derechos que Nicole Kidman consiguió gracias a que viajó a Australia para hablar personalmente con ella y conseguirlos para su adaptación. Menos mal que finalmente los consiguió en tan solo dos días, lo que nos permitió poder disfrutar de esta gran serie.
Custodio Guerrero
'Moulin Rouge' (2001)
Moulin Rouge es una de esas cintas que simplemente con ver un par de frames de la película, sabes que es un musical; y de los grandes. Además de contar con una acertadísima banda sonora, unas localizaciones de encanto y un vestuario de infarto, el filme cuenta con la magnífica actuación de Nicole Kidman. La actriz se mete en el papel de Satine, una cortesana del cabaret más famoso del mundo que trata de huir de aquel lugar y convertirse en actriz. Sin embargo, su vida toma un nuevo rumbo cuando conoce al bohemio escritor Christian (Ewan McGregor). Satine, sin duda, es uno de los mejores papeles de la actriz hasta el momento.
Moulin Rouge fue como el renacer de la intérprete, que venía de hacer papeles algo más retraídos como en Oscura obsesión o Eyes Wide Shut, esta última con su exmarido Tom Cruise. Pero con Satine, Kidman se desmelena y da rienda suelta a su talento. Además, el público descubre la fabulosa voz de la actriz que se encarga de interpretar gran parte de la banda sonora. Sin quitarle mérito, gran parte del éxito de la cinta fue la combinación perfecta con su compañero de reparto McGregor, con quien comparte una química espectacular que traspasa la pantalla. Moulin Rouge es toda una declaración de intenciones en la carrera profesional de Kidman para decir: ‘Estoy aquí, mira lo que puedo hacer’.
Ana Lasso
'Los Otros' (2001)
Por mucho que considere que Big Little Lies es una de las mejores series de la última década o que Moulin Rouge! sea una de las películas de mi adolescencia, cuando pienso en Nicole Kidman, no puedo dejar de pensar en Los Otros. La cinta dirigida por Alejandro Amenábar al frente de un reparto 100% internacional encabezado por la famosa intérprete fue un auténtico exitazo en su época y arrasó por completo en taquilla. Tercera película del cineasta tras Tesis (1996) y Abre los ojos (1997), volvía a apostar por el terror con una historia familiar de final inesperado. Ambientada en una mansión de la Isla de Jersey poco desués de la finalización de la Segunda Guerra Mundial, una mujer y sus dos hijos esperan a que su marido y padre, respectivamente, regrese tras haber luchado en la contienda.
En ella, Nicole Kidman interpeta a la madre de la familia, Grace Stewart, una mujer de gran rigidez, muy seria y profundamente católica que vive obsesionada con proteger a sus hijos de la luz del sol. Condenados a vivir una vida en penumbra y con estrictas normas en el día a día, sus vidas se verán alteradas por la llegada de tres nuevos sirvientes a la casa, que coincide con extraños sucesos que hacen sospechar a Grace que otras personas, "los Otros", viven en la casa. Aunque la clave de Los Otros es su capacidad de mantener en vilo al espectador en una constante sensación de "pelos de punta" -y en última instancia el final, claro está-, lo cierto es que la estrella indiscutible de la cinta es Kidman, quien absolutamente borda su papel de madre psicótica completamente superada por los acontecimientos.
Alicia P. Ferreirós
'Las horas'
Siempre resulta complicado elegir el mejor papel de una actriz o un actor. Es una elección en la que inevitablemente influye, además de la valoración técnica de su interpretación, la conexión que hayas creado con el personaje en cuestión. Pero sin duda, e independientemente de si empatizas o no con ella, el papel de Virgina Woolf que Nicole Kidman hace en Las horas merece que nos quitemos el sombrero; y por supuesto, no puede faltar en un listado sobre sus papeles más memorables. Esta brillante interpretación también conquistó a los académicos de Hollywood y gracias a ello se alzó con su primer, y hasta la fecha único, Oscar.
Con un aspecto totalmente irreconocible -gracias a la prótesis de nariz que luce así como a su cabello color negro-, la actriz se traslada a los años 20 para meterse en la piel de la conocida escritora, quien intenta lucha contra sus dramas mentales mientras escribe su famosa novela La señora Dalloway. Kidman lo borda, se impone sobre sus compañeras de reparto Meryl Streep y Julianne Moore, y, por si fuera poco, consigue que el espectador no la vea a ella en pantalla, sino a la mismísima Woolf.
Lorena Vialás
'Lion' (2017)
Puede que esta sea la interpretación que más haya emocionado a Nicole Kidman a lo largo de su carrera. Me atrevería a decir que el director no pudo acertar más eligiendo a la actriz para el papel. Lion habla de la búsqueda de identidad de un joven indio que abandona su hogar y a su madre adoptiva para viajar a su país y encontrar sus raíces. Este papel llega al corazón de Kidman porque ella, como su personaje, tiene dos hijos adoptados de su matrimonio con Tom Cruise.
Supo clavar tanto su papel que gracias a él recibió su cuarta nominación al Oscar por Lion. Basada en hechos reales, esta es una de las pocas veces que el cine no logra superar la realidad, al contrario, cuenta la historia que desafortunadamente viven muchos niños de la India. Obligados a caminar durante kilómetros para conseguir comida y dinero, algunos de estos pequeños se acaban perdiendo sin saber cómo volver a sus casas. Una desgarradora historia, en este caso con final feliz.
Bea Benés
'Stoker' (2013)
Hay algo hipnótico, magnético y seductor en Stoker. Es como si la película, dirigida por Park Chan-Wook, ejerciera una especie de campo gravitacional sobre el que la está viendo. Como si una misteriosa fuerza te fuese absorbiendo poco a poco hasta que no existiera nada más que esas imágenes. La culpa no es solo de la atmósfera, la estética y la historia; también de sus actores. Mia Wasikowska y Matthew Goode protagonizan este filme que escribió Wentworth Miller -el protagonista de Prison Break que debutó como guionista con este título- y, aunque Nicole Kidman se queda en un segundo plano, la actriz clava a la perfección el papel de madre vengativa, rencorosa y que busca seducir y que la seduzcan.
La historia sigue a India Stoker, una joven que acaba de perder a su padre, con quien mantenía una estrecha relación. A su funeral llega su misterioso tío: Charlie Stoker. India se siente atraída por él, un hombre críptico y sombrío cuya llegada coincide con la desaparición de ciertas personas. No solo las muertes están a la orden del día, también el trabajo de Charlie por poner a madre e hija en contra coqueteando con ambas. Convirtiéndose en el deseo de la progenitora de India y en el causante de los sentimientos enfrentados de la protagonista. Con Stoker, Kidman demuestra, una vez más, que la pregunta retórica de “¿hay algo que esta mujer no sepa hacer?” es algo que ya deberíamos haber superado en lo que respecta a la carrera de la actriz.
Andrea Zamora
'Batman Forever'
Dentro de su espectacular carrera como actriz, Nicole Kidman también ha tenido la oportunidad de aparecer en una película de superhéroes. Aunque no en el papel de una superheroína, como en realidad nos habría gustado verla, sino interpretando a la chica de la que se enamora el héroe protagonista. Este filme es ni más ni menos que Batman Forever, dirigido por Joel Schumacher en 1995. Una cinta que, aunque no cuenta con el mejor Bruce Wayne de la historia -lo siento Van Kilmer-, es bastante mejor que su predecesora Batman Vuelve, algo que tampoco era difícil tras su batacazo en taquilla. Además, Kilmer está rodeado de un elenco envidiable compuesto por actores como Tommy Lee Jones, que interpreta a Harvey Dent/Dos Caras; Jim Carrey y sus mil gestos que se encargan de dar vida al villano Enigma; y, por supuesto, Nicole Kidman, metiéndose en la piel de la doctora Chase Meridian, enamorada de Batman y Bruce Wayne sin saber que ambos son la misma persona. Un regreso a Gotham, en esta ocasión un poco más iluminado, en el que Batman tendrá que volver a salvar la ciudad de las malévolas intenciones de sus antagonistas.
Aida S. Anyolini
'Un horizonte muy lejano' (1992)
No es ni mucho menos la mejor película de Nicole Kidman, pero en mi casa nos sigue trayendo muy buenos recuerdos. Cuando llevaba dos años casada con Tom Cruise, y después de rodar Calma total (1989) con Sam Neill y Días de trueno (1990) -también con el protagonista de Risky business (1983) y Cocktail (1988)-, la ahora ganadora del Oscar, multipremiada y multirespetada actriz estrenaba esta Un horizonte muy lejano, dirigida por un Ron Howard que venía de hacer Willow (1988), Dulce hogar... ¡a veces! (1989) y Llamaradas (1991). Dirás que es simplista y melodramática y no te faltará razón. Pero a mí, con todas sus flaquezas, me sigue gustando. Y a mi madre, ya ni te cuento.
Con guion de Howard junto a Bob Dolman (Willow, Amigas a la fuerza), el largo -que tampoco funcionó en taquilla- cuenta la historia de Joseph Donnelly (Cruise), un humilde joven que, en la Irlanda de finales del siglo XIX, está empeñado en convertirse algún día en dueño de su propia tierra. Pronto conoce a la pudiente y remilgada Shannon Christie (Kidman), con quien después, con la promesa de tener una vida llena de oportunidades en Oklahoma, se traslada a América en barco. Y a partir de aquí pasa de todo, desde contactos con hombres corruptos hasta cuartos de alquiler en un burdel, peleas con las manos al descubierto, un romance ‘prohibido’ entre los protagonistas y una carrera por la tierra, ya en Oklahoma, en la que Tom Cruise va rápido como el viento a lomos de su caballo para cumplir aquello que le recordó su padre antes de morir: poder decir que un terreno es suyo y solo suyo.
Casi una década después, Cruise y Kidman volvían a poner sus nombres juntos en Eyes Wide Shut (1999) de Stanley Kubrick. Su divorcio se hizo efectivo en 2001 y de ahí ella pasó a encabezar películas como Moulin Rouge (2001), Las horas (2002) y Dogville (2003). Llámame romántico, pero yo seguiré pensando que, al menos en el mundo de la ficción, Joseph y Shannon continúan felizmente casados.
Santiago Gimeno
'Los Bicivoladores' (1986)
El cine de aventuras, más allá de las películas de corsarios de los años 50 y 60, vivió un renacer dorado durante los años 80. Largometrajes como En busca del arca perdida, Regreso al futuro o Willow, son sólo algunas muestras de ello. Pero lejos de los grandes estudios también nacieron filmes más modestos que se convirtieron en verdaderos taquillazos e incluso películas de culto. Una de estas producciones fue la australiana Los Bicivoladores (1983), -conocida en su país natal como BMX Bandits- que además tiene el mérito de haber descubierto al gran público a una jovencísima Nicole Kidman. La actriz -que por aquel entonces lucía gran cantidad de pecas y un pelo muy pelirrojo a la par que rizado- sólo había participado antes en un largometraje menor: Bush Christmas (1983). El filme es toda una oda a las bicicletas de la marca del título, que además supuso todo un impulso para su comercialización en Estados Unidos y Europa.
El argumento de Los Bicivoladores es el siguiente: tras un atraco a un banco, unos ladrones se plantean dar un golpe mayor. Para realizarlo se van a servir de una tecnología muy de la época: unos ‘walkie talkies’ con los que pueden hacer escuchas a la policía. Pero sus planes se verán truncados cuando tres fanáticos del ciclismo urbano encuentren los aparatos mientras pescan en el mar. A partir de aquí comienza la aventura de estos tres muchachos que se convertirán en héroes por casualidad.
Tomás Andrés