Hande Erçel triunfa en Turquía como actriz y modelo. La protagonista de Love is in the air no solo se ha ganado el favor de sus conciudadanos, también el del público internacional, que no se pierde ninguno de sus movimientos. ¿Quién le iba a decir a la joven Erçel que terminaría convertida en estrella? Siempre nos gusta echar la vista atrás para ver cómo eran los famosos en su infancia y adolescencia y, gracias a Albawaba, sabemos lo mucho que ha cambiado la actriz desde esa época.
Albawaba
El medio turco ha publicado una imagen de la actriz junto a su hermana Gamze cuando las dos deberían tener unos 15 años. No es de extrañar verlas juntas, ya que Hande ha declarado en varias ocasiones que tienen una relación muy estrecha y crecieron mano a mano. Eso sí, también ha confesado que pasaron una época problemática debido a las complicaciones propias de la edad. "Cuando crecimos, usábamos ropa diferente y había discusiones entre nosotras. Tenemos cicatrices de aquellos días. Gamze se portaba mal y recaía en mí", contaba en una entrevista con Ibrahim Selim.
Pero todo eso quedó atrás y ahora Gamze y Hande tienen una bonita amistad. Es habitual verlas juntas en redes sociales y, de hecho, la hermana de la actriz se unió al paradisiaco viaje de Maldivas donde se confirmó la relación de los actores de Love is in the air.
Dejando eso a un lado, la ganadora de Miss Azerbaijan en 2012 y considerada la mujer más guapa del mundo en 2020 ha cambiado notablemente, pero sigue manteniendo los mismos rasgos. Resulta curioso pensar que no pasaría mucho tiempo desde que esa imagen fue tomada hasta que Erçel diese sus primeros pinitos en el mundo de los medios de comunicación. Solo tenía 18 años cuando comenzó a trabajar como presentadora de las noticias.
La vocación de Hande Erçel siempre ha estado a medio camino entre la pintura y la actuación. Decidió estudiar Bellas Artes, pero la interpretación se cruzó en su camino y tuvo que dejar la escuela. Poco a poco se fue introduciendo en la escena de actores, empezó a hacer pruebas y vio que la cosa iba fluyendo. Cuando se quiso dar cuenta, ya estaba protagonizando telenovelas turcas como Hayat y dejó a un lado su sueño de ser artista, algo que, por otra parte, mantiene como afición.
