Martina Cariddi, una de las nuevas incorporaciones de Élite, es la responsable de interpretar a Mencía Blanco, una estudiante que ha llegado a Las Encinas para revolucionar por completo el corazón de Rebeka (Claudia Salas) en la cuarta entrega que acaba de estrenarse y que promete seguir haciéndolo en la quinta temporada de la serie que ya está en pleno rodaje. Aunque Rebeka comenzaba la nueva entrega de Élite todavía nadando en desamor y desconfianza fruto de su mala experiencia con Samuel (Itzan Escamilla), Mencía resultaba ser todo lo que necesitaba para dejar los malos sentimientos atrás y sentirse importante y deseada por alguien.
No es que la relación entre ambas adolecentes sea un camino de rosas y no presente ninguna problemática, pero la realidad es que su romance, en líneas generales, nos deja muchos más buenos momentos que malos. Y comienza por todo lo alto ya desde el primer episodio. Tras conocerse en clase y cruzar varias miradas seductoras en los vestuarios, Mencía y Rebeka se enrollaban por primera vez en la azotea del Riu, tras haber charlado, reído, bailado y haber tenido la oportunidad de haberse conocido mejor.
La escena en cuestión es una de las favoritas de Martina Cariddi, pero también recuerda que el rodaje no fue nada sencillo y que, a pesar de todo lo que le apetecía grabarla, tuvo una parte "un poco desagradable".
Así lo confiesa la actriz en un divertido vídeo de anécdotas publicado en la cuenta oficial de la serie en YouTube, donde recuerda que el rodaje de esa maravillosa cita tuvo que retrasarse varias veces por distintos motivos y que, cuando por fin pudieron llevarla a cabo, amaneció con anginas y fiebre. "Mi anécdota más curiosa es en mi primera cita con Rebeka, cuando estábamos en la azotea del Riu. Teníamos muchas ganas de hacer esa escena. Era una escena muy bonita y muy emotiva. Y se había pospuesto muchas veces", comienza Cariddi.
Justo el día que íbamos a grabar yo me puse malísima. Tenía anginas y 38 de fiebre. Pero había que grabarla sí o sí porque ya se había pospuesto muchas veces y no se podía retrasar más. El médico nos dijo que nos podíamos besar porque, como eran anginas, se las podía contagiar. Fue una gran catástrofe
Así lo recuerda la joven intérprete, que precisamente en esa cita se da unos cuantos primeros besos con Rebeka cuando Mencía consigue que la joven comience a dejarse llevar. Sin embargo, el equipo encontró la forma de solucionar el problema: con colutorio. "Lo que decidieron los enfermeros fue que nos tomásemos un enjuague bucal antes de cada beso. Entonces fueron unos besos un poco desagradables", comenta divertida.
Aún con esta historia detrás, el resultado de la escena quedó fantástico y la pareja de Mencía y Rebeka promete seguir siéndolo en la quinta temporada de Élite.