Puede que a las nuevas generaciones les pille un poco lejos la mítica Historias para no dormir de Chicho Ibáñez Serrador, la serie antológica en la que adaptaba distintos relatos de terror y suspense y que, eso por descontado, atemorizó a nuestros padres y abuelos entre los 60 y los 80. Pero hincarle el diente al icónico formato, por lejano que quede, quizá sea todo lo que quieras hacer tras disfrutar del homenaje que se estrena este viernes 5 de noviembre en Amazon Prime Video. De nuevo bajo el título Historias para no dormir, un grupo de cineastas, Rodrigo Cortés, Rodrigo Sorogoyen, Paco Plaza y Paula Ortiz, han llevado a cabo su particular 'remake' y brindado a los espectadores versiones actualizadas de algunas de las mejores historias de Chicho Ibáñez Serrador. Cuatro relatos autoconclusivos que ellos mismos han podido elegir entre los más de 30 creados por el brillante director, guionista y realizador.
Los elegidos: 'La Broma', dirigido por Rodrigo Cortés y protagonizado por Nathalie Poza, Eduard Fernández y Raúl Arévalo; 'Freddy', dirigido por Paco Plaza y protagonizado por Miki Esparbé, Adriana Torrebejano y Carlos Santos; 'El doble', dirigido por Rodrigo Sorogoyen y protagonizado por Vicky Luengo y David Verdaguer; 'El Asfalto', dirigido por Paula Ortiz y portagonizado por Dani Rovira e Inma Cuesta.
CUATRO RELATOS, CUATRO RAZONES
"Vimos las historias y cada uno agarró aquella con la que tuvo un chispazo", recuerda en entrevista con SensaCine Paula Ortiz (La novia), que dirige el primer relato, 'El Asfalto', con Cortés como guionista. "Cuando luego lo hablamos como grupo y compartimos lo que nos había llevado a cada uno pues al final eran filias, fobias y retos. Necesidades, electricidades interiores...". "El Asfalto' me pareció una idea, una imagen y un acto tan potente el de un hombre que se lo traga la tierra, que simplemente me dije: 'Me encantaría contarlo'. Y eso ocurre exactamente en su relato, en el que un repartidor de comida en bicicleta encarnado por Dani Rovira es literalmente engullido por el asfalto de su ciudad sin que nadie le haga mucho caso.
Ortiz se puso tras las cámaras de 'El Asfalto', el episodio por el que seguramente te quedes a ver la nueva Historias para no dormir, pero el proceso de escritura de guion fue llevado a cabo por Manuel Javois y Rodrigo Cortés. Este último, además, también dirige uno de los cuatro relatos: 'La Broma', sobre un matrimonio miserable en el que ella quiere acabar con la vida de él. "Lo que me interesaba de 'La Broma' es que era un triángulo que podía llevar al cine negro. [...] Crear una historia de seres egoístas dispuestos a traicionarse en cualquier momento y mezclar lo divertido, lo espantoso y lo ridículo para crear algo divertidamente cruel", explica Cortés sobre su elección.
Era una forma de rendirle homenaje a Chicho [Paco Plaza]
"[Elegí 'Freddy'] Porque era una forma de rendirle homenaje a Chicho", explica Paco Plaza, director de La abuela y Verónica, entre otras, sobre lo que le llevó a elegir el episodio sobre un muñeco ventrílocuo asesino que se convierte en la estrella de un programa conducido por el propio Serrador. "Y también ha sido una manera de salirme de la solemnidad de La abuela y poder divertirme un poco. Ha sido como jugar con un scalextric".
Sorogoyen (Antidisturbios, Madre, El Reino), por su parte, sintió que 'El Doble' le proporcionaba "el paraguas de género perfecto" para hablar de las inseguridades en las relaciones de pareja: "Sobre esas cosas que a uno le faltan, sobre sentir que no se es capaz de llenar las necesidades del otro... Inseguridades". En 'El Doble', un futuro avanzado pero no demasiado lejano en el que las Inteligencias Artificiales juegan un papel fundamental, plantea la posibilidad de comprar un doble y esa será la perdición de una pareja que no está pasando por su mejor momento.
"JUGAMOS CON VENTAJA. CHICHO HACÍA ESAS HISTORIAS EN DOS DÍAS"
Cincuenta años después, las historias que ahora relatan estos cuatro cineastas no solo cambian en la forma en la que podrían plantearse hoy día, sino en que, a nivel de producción, ganan enteros en cuanto a los medios con los que han contado sus equipos. Desde los intérpretes que se han incorporado a sus filas para interpretar a los protagonistas de cada uno de ellas hasta, y más importante, los avances tecnológicos que se han producido en la industria desde que Chicho Ibáñez Serrador comenzó a desarrollar estas historias de forma semanal para RTVE. En tiempo récord y sin apenas medios.
La comparación con los originales es brutalmente injusta por las condiciones en las que Chicho rodaba [Paco Plaza]
La comparativa sería injusta, deja claro Plaza desde un primer momento. "A veces rodaba los capítulos en un día. Fueron deudores de una época, de una forma de hacer televisión, de una ambición... En ningún caso se planteaban, como nos hemos podido plantear nosotros, hacer una pieza con una ambición estética y de perdurar. Esto es algo que va a estar en una plataforma y será accesible pero, cuando Chicho trabajaba en esto era un episodio a la semana con una formación de actores casi teatral", sostiene el director. "Tú cuando ves ¿Quién puede matar a un niño? o La Residencia sí estás viendo la categoría como cineasta de Chicho, pero juzgarle por si estuviera haciendo Amar en tiempos revueltos, por ejemplo, no sería justo. Las condiciones y exigencias eran muy diferentes".
"Jugamos con ventaja, porque Chicho tenía que hacer esas historias en dos días muchas veces", coincide Cortés. "Y reciclando decorados, en estudio, con tomas muy largas y con actores muy formados en teatro para poder sostenerla durante 20 minutos sin pausas y sin errores. Así que conseguía hacer con lo mínimo historias que tuvieran un alcance popular y sociológico irrepetible. Y nosotros hemos trabajado con los medios del cine, con calendarios más dilatados y con todos los medios con los que nos encontramos en la producción de un largometraje".
"Y el valor de Chicho era ese", ensalza Ortiz. "Que era muy kamikaze. No sólo contaban con poquísimo tiempo, poquísimos recursos y unas herramientas absolutamente artesanales, sino que era un medio que empezaba. No tenían apenas nada, no tenían campo recorrido, no tenían las carreteras con las que surcar que nosotros sí hemos tenido".
Para Ortiz, además, ha sido un deleite formar parte de este homenaje el mítico cineasta, fallecido en 2019, porque, según reconoce a SensaCine, "personalmente me gusta mucho la adaptación".
Tiene sentido o no volver a contar una historia venga de donde venga siempre y cuando tenga algo universal que hace que, cada vez que le das una vuelta, te vuelva a alumbrar de nuevo [Paula Ortiz]
Ella lo tiene claro: "Si eso es así, merece la pena. Si no, pues no, contemos cosas que ocurren ahora". Cortés, por su parte, confiesa que tiene una opinión "ambivalente" sobre los 'remake': "Por un lado creo que hay una fiebre excesiva de material no original para tratar de buscar garantías y basarte en algo que ya ha sido previamente testado; y, a la vez, hay grandísimos 'remakes'. Personalmente, sólo me interesan si es para adaptar una película que no salió del todo bien o que no es una película mítica y definitiva. Sobre esas creo que no hay que acercarse, ya están hechas y son definitivas. Pero luego hay otras veces que es material menos noble, entre comillas, pero que es una premisa muy poderosa, y entonces me parece muy interesante un segundo intento".
Sobre Historias para no dormir, su experiencia con sus respectivas historias, su relación con el terror y y el acercamiento a las historias de Serrador también han hablado los protagonistas de la serie, cuyos comentarios puedes ver en el vídeo de la entrevista con SensaCine que encontrarás sobre estas líneas.