Podríamos decir que ya tenemos la primera sorpresa de 2022. Una miniserie británica que ya ha enganchado a los suscriptores de Netflix. Y es que en su primer fin de semana disponible ya se ha colado en el top 10 de la plataforma de ‘streaming’. Hablamos de Quédate a mi lado, la nueva adaptación del conocido escritor Harlan Coben. Un adictivo thriller lleno de suspense y tensión que nos plantea cuánto desconocemos de una persona a pesar de conocerla desde hace años.
Ambientada en Reino Unido, Quédate a mi lado nos presenta tres personajes muy diferentes. Megan es una mujer trabajadora que cría a sus tres hijos, Ray era un fotógrafo prometedor que está atrapado en un trabajo gastronómico y Broome es un detective incapaz de dejar atrás un caso de desaparición sin resolver. Sin embargo, sus vidas cambian totalmente cuando una persona del pasado de Megan vuelve para contar un secreto de su pasado.
La serie de ocho episodios está creada por Harlan Coben y dirigida por Daniel O’Hara y Lindy Heymann. El reparto está formado por Cush Jumbo, James Nesbitt, Richard Armitage, Eddie Izzard, Dylan Francis o Sarah Parish, entre otros.
COBEN PURO
Quédate a mi lado es la última adaptación de Harlan Coben en aterrizar en Netflix, y ya estamos seguros de su éxito. Este drama criminal cuenta la historia de Megan una mujer con una vida familiar perfecta, pero con un pasado muy misterioso. Y, como hemos dicho anteriormente, todo cambia cuando surgen viejos secretos y personas de su pasado. Megan hará todo lo posible para seguir manteniéndolo oculto.
La serie engancha desde el primer minuto, pero ese no es su verdadero desafío. Con una trama ya muy vista en otros thrillers, Quédate a mi lado debe encontrar la manera de evitar que la historia se repita. Y la verdad es que lo consigue. Gracias a su cuidadoso guion, nada es lo que parece y la intriga es constante.
El espectador no tiene que esperar más de diez minutos para saber que Megan esconde un gran secreto. De vuelta a casa, la noche de su despedida de soltera, está a punto de casarse con el padre de sus hijos con quien lleva 16 años, encuentra un sobre colocado frente a una botella de champán con el nombre de Cassie escrito. Y por la expresión de su cara, no es un nombre cualquiera.
Rápidamente comprendemos que Megan ha enterrado su pasado como bailarina de un club nocturno al que la serie hace muchas referencias con flashbacks. Además, una serie de sucesos llevaron a la protagonista a cambiar de identidad y empezar de cero. Una nueva vida tranquila que cambia cuando regresa un peligroso hombre, obligándola a enfrentarse a su pasado para mantener a salvo a su familia.
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A la vez, encontramos muchas subtramas que están enrevesadas entre sí. Dos detectives, antes casados, que investigan una desaparición sin resolver desde hace tiempo. Un fotógrafo que parece tener una conexión con Megan y el hombre desaparecido. Y un drogadicto adicto a la heroína, pero se revela como un abogado con un gran corazón que rescata a strippers y prostitutas.
Los personajes son lo suficientemente sólidos y buenos como para que quieras saber más sobre ellos. Eso sí, gracias a la magnífica interpretación del reparto. Si además le sumamos una historia llena de emoción y del suspense más intrigante, hacen la miniserie perfecta para ser el primer visionado de este nuevo año.
