La temporada 2 de Los Bridgerton ha llegado pisando fuerte en Netflix y batiendo nuevos récords tras la excelente acogida que tuvo la primera. Es difícil llegar a las cifras que acompañan a El juego del calamar como la nueva serie más vista de la historia de la plataforma, pero la adaptación de la saga de novelas de Julia Quinn va batiendo, poco a poco, los suyos propios. Uno de ellos es el que la consolida como el mejor debut de una serie de habla inglesa en su primer fin de semana, con 193 millones de horas vistas en sus tres primeros días en la plataforma.
Asimismo, en su primera semana en la plataforma de 'streaming', la serie anotó 251,7 millones de horas, superando con creces la también serie de Shondalad ¿Quién es Anna?. Y bueno, que nadie le quita ser la segunda nueva serie más vista de la historia de la plataforma. Al menos de momento.
La temporada 2 de Los Bridgerton nos ha cautivado por varias de sus muchas virtudes. Vale, Simon Basset ya no estaba entre sus filas tras la salida de Regé-Jean Page, pero la entrada en escena de las hermanas Sharma recién llegadas de la India le ha aportado un punto de frescura importante. La dinámica de las hermanas con el vizconde Anthony Bridgerton ha sido el eje central de los nuevos episodios y el triángulo amoroso, complicado como pocos, le ha dado mucha vida a esta nueva historia de amor.
Asimismo, el resto de personajes y tramas han crecido de forma bastante notable y asentado sus caminos para una tercera temporada de la que todavía no sabemos quién será el protagonista. ¿Quizá Benedict?
Al contrario que en la primera temporada, en la segunda temporada ha reinado la tensión sexual por encima de las escenas íntimas en sí, que hemos podido contar con los dedos de una mano.
'Los Bridgerton': ¿Por qué hay notablemente menos sexo en la temporada 2?Chris Van Dusen, el 'showrunner', ya explicó que la razón es porque, en Los Bridgerton, las escenas de sexo sirven a un propósito mucho mayor, que es la propia historia. "Los momentos candentes son tan sexys y escandalosos como la primera temporada, en cuanto a las miradas anhelantes a través de la habitación o ese dedo cercano, que roza y toca la mano", explicaba el 'showrunner' a Digital Spy. "Todo eso se suma a la tensión sexual que puede sentirse esta temporada y que se ve crecer. Puedes sentir que crece y crece. De escena en escena, de episodio en episodio".
Sobre las escenas de sexo también ha hablado Simone Ahsley, la encargada de dar vida a Kate, en declaraciones a TVLine. En sus confesiones, la también actriz de Sex Education, ha destacado que tanto ella como Jonathan Bailey fueron protegidos y respetados en todo momento.
Nuestra coordinadora de intimidad, Lizzy Talbot, fue increíble. Nos permitió desglosar las escenas para que no hubiera sorpresas ese día. Es como un baile. Y también hay intención detrás de esas escenas. Está coreografiado, pero viene de un lugar de sentimiento y comodidad. Me sentí muy cómoda, confiada y segura
Asímismo, todo son palabras de cariño y alabanzas hacia su compañero, Jonathan Bailey, con quien la química es innegable y traspasa la pantalla en cada mirada: "Fue increíble trabajar con Jhonny", recuerda Ashley. "Tenemos un vínculo especial, y él es un actor y una persona muy generosa con quien tengo una química increíble. Afortunadamente, la audiencia pudo percibirlo".
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