El actor Ryan Grantham fue uno de los varios jóvenes interpretes que tuvieron paso por la exitosa Riverdale. Su acto de mayor relevancia durante la serie fue (cuidado: spoilers) cuando su personaje, por accidente, mata al personaje de Luke Perry al inicio de la cuarta temporada. No obstante, en la vida real realizó actos peores y nada accidentales.
En el pasado mes de marzo, Grantham se declaró culpable ante un juzgado canadiense por asesinar a su madre, de 64 años, mientras estaba tocando el piano. Según admitió en la audiencia, le disparó en la nuca como parte de un plan más elaborado que implicaba una conspiración para cometer magnicidio.
En su confesión, Grantham admitió que su segunda víctima iba a ser Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá, y que se había equipado con tres pistolas, municiones, doce cócteles molotov, un mapa con direcciones y material de acampada para su largo viaje en carretera para cometer el acto criminal. El asesinato a sangre fría de su madre fue un paso previo del proceso, ya que, en palabras del actor "no quería que ella viera el acto de violencia que iba a cometer".
En la audiencia del caso se desveló también cómo no intentó finalmente cometer el asesinato de Trudeau, recapacitando en mitad del trayecto y entregándose a la policía de Vancouver. Grantham aceptó el cargo por asesinato en segundo grado de su madre, que implica cadena perpetua en la Columbia Británica, y el juez determinará cuando podrá optar a la libertad condicional, que puede situarse entre los 10 y los 25 años.
Las cuatro primeras temporadas de Riverdale se pueden ver en Netflix y en HBO Max.