BRILLANTE BIOPIC DEL 'PADRE DE LA COMPUTACIÓN'
Alan Turing fue un hombre con una mente muy brillante. Reconocido como genio informático y "padre de la computación", se movió en campos tan dispares como las matemáticas, la filosofía, la biología, la química y podría decirse que la ciencia en general. Sus aportaciones en el campo de la criptografía sirvieron para que la Segunda Guerra Mundial durara mucho menos de lo esperado, gracias a la decodificación de los planes secretos de los nazis de su máquina Enigma, por lo que los aliados pudieron alzarse con la victoria antes de lo previsto. Sin duda, un auténtico hacker. Siendo el precursor de la informática moderna, diseñó uno de las primeras máquinas electrónicas programables digitales y contribuyó a lo que más adelante se denominó 'inteligencia artificial'.
La película que nos concierne, "The imitation game (Descifrando Enigma)" recoge la fascinante historia de uno de los hombres más influyentes del Siglo XX, cuando fue reclutado por el Servicio de Inteligencia Británico para descifrar el código nazi Enigma, durante la Segunda Guerra Mundial, aunque lejos de ser admirado como un héroe, Turing fue acusado y juzgado desgraciadamente por su condición de homosexual, que le llevaría a ser imputado por indecencia grave y perversión sexual, y siendo el detonante de su suicidio en 1952.
El director noruego Morten Tyldum es el encargado de dirigir el biopic, siendo ésta su primera película en tierras británicas, después de sus cuatro largometrajes realizados en su país, de los cuales destaca la recomendable "Headhunters". Tyldum le imprime clasicismo y elegancia al filme, destacando de sobremanera el excelente trabajo en la dirección de actores, en el que todos están realmente notables: Benedict Cumberbatch, Keira Knightley, Mark Strong, Charles Dance, Matthew Goode; aunque por encima de todos ellos se erige Cumberbatch, que encarna al famoso matemático, y que posiblemente realice la mejor interpretación de toda su carrera, aportando de manera impresionante todos los matices que requiere el personaje. También es digno de mención el sólido guión, basado en el libro de Andrew Hodges, llevado a cabo por el joven escritor Graham Moore, que fue galardonado en la pasada entrega de los premios Oscar. Moore fragmenta la historia en tres líneas argumentales, que se van desgranando de forma paralela e interesante: una se centra en los años mozos de Turing cuando era estudiante, otra cuando fue imputado por su condición de homosexual, y la otra cuando fue contratado para descifrar el código, siendo ésta última la principal. Asimismo, Alexandre Desplat compone una banda sonora realmente preciosa, que enfatiza tanto los momentos de tensión como los emotivos.
Es posible que la historia contenga varios errores con respecto a la realidad; sin embargo, siendo una película de ficción, al adaptarla se pueden tomar ciertas licencias narrativas para dramatizarla. En este caso, las variaciones (que haberlas, haylas), no entorpecen el resultado final de la cinta, ya que si de verdad se pretende saber a ciencia cierta la vida del matemático, lo ideal es ver un documental y no un filme totalmente de ficción. Dicho esto, perdonando las variaciones, no hay nada que achacar a este gran biopic.
En síntesis, "The imitation game" es un filme notable, muy bien dirigido (y más aún interpretado), con un impresionante Benedict Cumberbatch, y que da a conocer la importancia que tuvo el matemático en el devenir de la 'Gran Guerra', y también en el campo de la computación.