[...] No tenía muchas esperanzas en eso de cruzar varios cuentos de los hermanos Grimm y que el resultado fuera algo original y distinto de lo visto anteriormente. Pero he de reconocer que me ha sorprendido bastante, el resultado es más que satisfactorio, resulta entretenido y la mezcla ha quedado muy simpática, será que tengo debilidad por Disney o que no se pueden poner pegas al talento de actrices como Meryl Streep o Emily Blunt.
Me ha gustado mucho que se mantenga fiel al espíritu de cuento de hadas y personajes como la bruja, el panadero o su mujer no tengan nombre y sean “el panadero” y “la mujer del panadero”, incluso a Caperucita Roja nunca la llaman por un nombre de pila, solo muchacha o apelativos parecidos. También que, a pesar de ser una película Disney, no han modificado los pasajes más escabrosos de los cuentos de los hermanos Grimm (como si han hecho en las cintas de animación) y así podemos ver como las hermanastras de Cenicienta se cortan los dedos de los pies para poder ponerse el zapato, eso sí, fuera de plano, no veremos ni una gota de sangre a pesar de que se destripan lobos, se cortan pies, se matan abuelitas o el príncipe se queda ciego al pincharse con unas zarzas.
La trama tiene dos partes claramente diferenciadas, una primera que gira en torno a los cuentos clásicos (Jack y las habichuelas mágicas, Rapunzel, Cenicienta, Caperucita Roja) y que termina con los finales que todos conocemos de estos cuentos. A pesar de ser la parte menos original, o la más clásica, resulta ser la más divertida y dinámica, vamos conociendo a los distintos personajes y viendo cómo se entrelazan las tramas de una manera enérgica y amena, además de conseguir que Meryl Streep brille por encima del resto del reparto.
La segunda parte es más atrevida pues pretende dar una visión más real de la historia y mostrarnos que hay después del “comieron perdices”. Es cuando nos encontramos con un Príncipe infiel, niños que se quedan huérfanos y solos en la vida o todo un pueblo buscando al torpe de Jack para entregárselo a la mujer del gigante que busca venganza. Esta parte se hace más pesada, es más seria, pierde la chispa del principio y es menos musical, pero también más trasgresora en la forma de continuar los cuentos, algo que no deja de tener su gracia, a pesar de todo.