Amarillos, frescos, divertidos, gamberretes y sobre todo, adorables. La verdad es que todos querríamos un minion, así, pues como nosotros somos unos de ellos, nos fuimos directos a verla en el cine.
La verdad es que, aunque no es una Obra Maestra, ni pasará a la historia como una gran cinta, si que es divertida, con un montón de gags y refrescante. Recomendable para incondicionales de los minions y para nuestros pequeños.
Por cierto, ¿con que minion os quedáis?