No es perfecta, no destacará por su calidad técnica, por su ritmo, incluso algunos momentos quedarán excesivamente forzados, exagerados, o demasiado perfectos, pero... Maldita sea, ¡que bonita es!
No soy mucho de películas románticas, y no iba con demasiadas expectativas, pero la película me ha encantado. Me ha encantado la historia, y me ha encantado como me ha hecho sentir, la capacidad para hacerme reír, y en la escena siguiente ponerme un nudo en la garganta. Una sensación agridulce, si, pero que preciosa lección de vida. Es un tema complicado este del cáncer juvenil, pero lejos de regodearse y compadecerse en su pena, los protagonistas intentan vivir sus últimos días de la mejor manera posible.
Las actuaciones están mucho más que correctas. He visto la mejor versión de Shailene Woodley, la Woodley de 'Los Descendientes', después de la decepción que me lleve al verla tan cohibida en la saga 'Divergente'. Ansel Elgort con su desparpajo, sin ser especialmente guaperas, hace que te enamores de su Augustus Waters desde el primer instante que aparece en pantalla. Secundarios de lujo como Laura Dern o Willem Dafoe, aportan seriedad y madurez a la producción. Y por último me gustaría destacar a Natt Wolff, el amigo ciego, que consigue sacar una sonrisa cada vez que aparece en pantalla.
No es solo una película de amor, no. Es una historia de una enfermedad como el cáncer, de como se lo puede tomar una adolescente, y de como lo trata con su familia, en especial con su madre, ya que la trama con el padre está poco desarrollada. Y la verdad es que lo hace de manera muy madura, "lo único peor que estar muriéndose de cáncer, es tener una hija muriendose de cáncer", que gran lección de la protagonista.
La única pega que le puedo poner es que hacia el final se me hizo lenta, dos horas tal vez son demasiadas para esta cinta. Y también es cierto que en ocasiones abusa del discurso literario. Entiendo que hay conversaciones y discursos muy bonitos que aparecen en el libro, pero al trasladarlo al audiovisual, queda un tanto forzado. Y que contradictorio, esos largos y bellos discursos, son de lo que más me ha gustado de la película, bonitas frases que perdurarán en mi memoria.
En definitiva, le pongo un siete, porque, como he dicho, carece de muchas cosas para ser una buenísima película. Pero llega al espectador, es una buena historia, con unas buenas interpretaciones. Si estáis indecisos por ser una película para adolescentes, o teméis que vuestra novia os arrastre al cine, creo que no es tan grave, no se la recomendaría a todo el mundo, ¡pero yo me la esperaba mucho más edulcorada!