Últimas opiniones sobre De padres a hijas

Siempre que veo una película luego entro a ver las críticas, a veces no entendemos del todo el mensaje que nos quieren transmitir o a veces por nuestras vivencias le damos uno u otro significado, en primer lugar quizás quien tiene un hijo entiende lo que significa el sacrificio, la necesidad de un padre que no cuenta más que con él mismo para cuidar de su hija y la culpa de la hermana de la esposa que cree que su hogar es el perfecto para que esa niña crezca sin darse cuenta que su propio hogar es un caos, quizás lo que más me impactó fue el hecho de que a veces los padres luchamos tanto para hacer lo mejor para nuestros hijos y finalmente algunas veces el destino tiene otros planes, al final Diane Kruger dice algo que me dejó pensativa "quizás los hombres pueden vivir sin amor pero las mujeres no" creo que nadie puede vivir son amor, es una película emotiva de principio a fin con actuaciones muy convincentes, y la forma en el que la protagonista se logra sanar a través de su paciente es otro punto muy hermoso.

Excelente película, demuestra como el miedo amar nos puede hundir.... y no poder luchar contra nuestros miedos, y buscamos refugio en otras cosas sin darnos cuenta que necesitamos ayuda

Una de las falsas creencias de la burguesía en general es que puede adquirirlo todo con su
dinero, incluidos los sentimientos humanos. Buen hacer del "Gladiator" Russell Crowe en
el papel de viudo, y su relación de extremo amor correspondido con su hija a lo largo de
toda la cinta. En mi parecer, película ENTERNECEDORA. .3 sobre 5. ..PICARD..

Excelente película
Mensaje atinado sobre el amor
No tengas miedo a intentar querer alguien después de una prueba dificil

Una maravillosa historia de amor de un padre a su hija me llegó profundamente perdi a mi padre hace 2 años era mi gran amor de niña mi futuro esposo lo era todo para mi pero despues de conocer a una mujer mas joven y enamorarse ya dejé de ser la niña de sus ojos me habria encantado que hubiera muerto cuando aun yo era su mundo y no tener este recuerdo de tristeza y abandono cuando aun vivia los padres debieran amar a sus hijos en forma natural mas que a nada en el mundo por sobre todas las cosas como lo hizo este hombre en esta cinta crecer viendo un padre ausente estando a tu lado es doloroso y en edad adulta requiere de ayuda para entenderlo fui la niña de papá y esta pelicula me llevó a esos dulces momentos en que de verdad era amada hoy vivo eso con mi hijo su padre lo abandonó mi hijo sufre por esto y lo entiendo tanto pero es triste ver que a pesar de todo lo que una puede hacer por ellos y amarlos tanto la ausencia de uno de los padres en la infancia deja marcas para siempre..

Hermosa!. Centrada en una súper emotiva relación de amor de un padre y su pequeña hija que deben atravesar terribles adversidades repercutiendo, dichos sucesos, en la vida adulta de la protagonista. Muy enternecedora. Se les va a anudar la garganta en mas de una oportunidad. La súper recomiendo.

Me ha encantado la pelicula. Los actores interpretan su papel de tal modo que te adentras en la pelicula.De mis pelis favoritas sin duda. La recomiendo 100%!!

Considero que es excelente pelicula, ya que de una manera sencilla cuenta los problemas que tenemos muchos padres en criar a nuestros hijos en ausencia de su madre; a tal motivo la considero excelente. Las actuaciones de cada actor es muy buena y nos hace introducirnos en su vision del mundo que los rodea, y nos hace comprender los distintos pensamientos sin tener que llenarnos de tantos detalles.

“Tengo una hija que criar”, aunque me cueste la vida.

La transición de papatica, mía y de nadie más, a Katie, adulta y de nadie, te mantiene pegada a la pantalla, el por qué de ese desorden psicológico que le lleva a ayudar a los demás pero a herirse a si misma, incapacidad de amar y permitir ser amada como fruto de ese desierto duro, áspero y seco que es por dentro y cuyo origen se encuentra en esa infancia feliz que, aún no se sabe cuándo, cómo ni por qué derivó a una angustia anímica y agudizado dolor a ser abandonada y un miedo constante a no dejar de sufrir.
Sólo que, tan revelador misterio de raíz y causa no parece estar a la altura de lo esperado, el desenlace de tan cautivador y tierno juego, entre pasado y presente, cubre para dar razón de todo el teatro visionado pero no deja de ser ligeramente endeble para tanta espera, seducción, sencillez y dulzura de performance.
Trágica historia, hiriente y culpable, con ese aroma dulce, comprensible y cariñoso que arropa tanta dolencia y que envuelve el ambiente con estima y placer, un drama no resuelto, que se regodea en sus flashback temporales, con gotas hipnóticas de amor, dicha y alegría que abrazan y sugestionan sin levantar gran arrebato, pero con la justa eficiencia para no despegar el interés del libreto.
El relato gusta, las escenas seducen y el juego incógnita funciona lo suficiente para no perder estela de lo narrado, aún anticipando su camino y desenlace; nada importa, Russel Crowe, simpático y sobrecogedor, es el papá héroe que lo dará todo por su querida retoña, amada bendición que le inspira para escribir y le da fuerzas para resistir las embestidas de la vida; Kylie Rogers, maravillosa, conquista los corazones de la audiencia como chispita de papa que todavía no conoce su porvenir fatídico, más una atractiva, hundida y desarmada Amanda Seyfried que induce a mantener la atención y saber de ella pues, al igual que la requerida tiende una mano a quien inocentemente lo necesita, tú te quedas a su lado oyendo y observando por tristeza, afecto, preocupación y predilección voluntaria por conocer de su vida y descubrir su gran tormento.
No dejo de apuntar que es todo un clásico que sigue los pasos esperados sin saltarse una coma, que es emotividad cliché usada para establecer esa conexión bonita, grata y sensible con el público pero, lo realiza con soltura, naturalidad y vocación de acompañarles sin lamento; es estándar pero ¡qué más da! si disfrutas del cuento, de sus emociones y de la conexión afectiva, doliente y entusiasmada que se establece entre los actores y con su concurrencia expectante.
La familia y sus desgarradores y espléndidos momentos, la enfermedad mental, la ineptitud de querencia, el miedo al desamparo, la frustración de una herencia impuesta, la valentía de seguir, de solucionar y hablar por fin de esos sentimientos que se permiten ser, estar y vivir; no es complicada, es enormemente sencilla y acoplada al pedido consumista, su fondo no aporta novedad, su estética es correcta, su música más excelsa..., y todos los reparos condicionantes que se quieran pero el vidente la acoge, abraza y baila con ella, con la misma facilidad, franqueza y modestia que ella expresa lo ya dicho y visto antes.
De padres a hijas, de hijas a recuerdos de padres, la ausencia del mismo, el encuentro del amor, la inestabilidad emocional de ello, la herencia pesa, el legado no es el más apropiado, los tormentos, la desazón y los pesares no cesan pero no hay que rendirse, hay que continuar tramo a tramo, y tú la escoltas con satisfacción, deleite y empeño; repito..., ¡qué más da que ya se sepa, o resulte familiar y conocido! Lo has pasado bien ¿no? Es lo que cuenta.
A veces hay que decir te quiero, te echaré de menos, adiós; duele, pero es lo correcto.

Lo mejor; sus actores intérpretes, que dan alma y candor a su recepción.
Lo peor; no es una gran historia, únicamente un testimonio más.
Nota 5,7

La vi sin ver críticas y puntuaciones para dejarme sorprender, y he hecho bien. Realmente me ha encantado...un drama muy bien logrado, que atrapa y emociona. spoiler: Me ha encantado el "final feliz", le da el toque esperanzador que me emocionó a las lagrimas.
Excelente los actores, no defraudan.